27 de abril de 2023
Noticia
Se enamoró de un preso, se casaron y ese mismo día la mató
La mujer estaba cegada por el amor y terminó muerta
Por: soho.coEl caso Oksana Poludentseva, una mujer de 36 años que tenía toda una vida por delante llamó la atención de los usuarios en internet que aún no se explican como una mujer se pudo enamorar de un preso.
La mujer estaba soltera y de un momento a otro, le comenzaron a llegar unas cartas muy románticas de un hombre que se encontraba en Rusia, pero no trabajando o ganándose la vida normalmente, sino que estaba privado de su libertad, en dicho país, que para quienes no saben, hay distintos tipos de cárceles en todo el mundo, sobre todo en los países más desarrollados, donde las prisiones lucen diferentes a las latinas y son más humanas respecto al trato al delincuente.
El sujeto en cuestión se llama Stepan Dolgikh, un preso de 35 años que estaba preso pero que demostraba tener todas las intenciones de salir de allá para vivir una vida normal y plena con su pareja luego de vivir tal castigo.
Además, porque la mujer le había seguido el juego con los mensajes y cartas de amor, lo cual era muy entretenido y divertido para su cotidiana situación. Lo cierto es que con el paso de los días los mensajes se volvieron más intensos y comprometedores, al punto en que, hacerse promesas inquebrantables era normal para ellos.
Fue así, como la mujer cayó tendida a los pies del sujeto y le prometió que lo esperaría toda su vida, y así, cuando saliera, podrían comprometerse, tener un matrimonio y compartir frente “a los ojos de Dios”.
Así fue, cuando un día Stepan salió y como ya tenían planes se encontró con su pareja, quien lo llevo a Chik, un pueblo ruso para que conociera a sus padres y así pudieran casarse. El preso ya había acordado con ella una fecha de matrimonio y la celebración estaría llena de festejo con sus amigos y familiares.
Nadie sabía que el sujeto acababa de salir de la cárcel por lo que las sospechas eran nulas, parecía un hombre completamente enamorado, no obstante, a Stepan parecía que algo le había entrado en el cuerpo y de repente, comenzó a golpear a su pareja el mismo día de la celebración religiosa.
Todos los invitados y demás asistentes, no podían creer lo que estaba sucediendo e incluso varios de ellos se quedaron en shock y no lograban reaccionar. Posteriormente, cuando todo culminó, el preso argumentó que tenía celos porque vio a su esposa sonreírle a otro hombre que era un invitado especial.
Lo cierto es que el preso, empujó a su esposa hasta la calle, la golpeó con puños y patadas, hasta que la golpiza acabó con su vida. Cuando las autoridades llegaron, retiraron al sujeto, lo detuvieron y días después lo sentenciaron nuevamente a pagar 18 años de prisión por haber matado brutalmente a su esposa por celos.
Los familiares y amigos estaban consternados, rápidamente llevaron a la novia al centro medico más cercano, cuando el doctor les dijo que ya era muy tarde y que no pudieron revivirla. En vez de tener una celebración, terminaron en un triste velorio, el cual, no quisieran más nunca repetir.