11 de abril de 2025
Libros
Crimen, culto y oscuridad: el nuevo viaje literario de Esteban Cruz Niño
En un continente donde la pólvora y la devoción suelen ir de la mano, Esteban Cruz Niño se atreve a encender una nueva llama.
Por: Redacción Soho
En un continente donde la pólvora y la superstición caminan juntas desde hace siglos, la línea entre lo sagrado y lo criminal es más delgada de lo que parece. Esa frontera invisible es la que decide atravesar Esteban Cruz Niño en su más reciente obra: “Pablo Escobar y los patrones de la brujería”, un libro que promete incomodar a más de uno al revelar los oscuros vínculos entre la fe popular y el crimen organizado en América Latina.
Cruz Niño, autor best seller con títulos como Los monstruos en Colombia sí existen, Expedientes X Colombia y El libro negro de la brujería en Colombia, ha construido su carrera desentrañando los rincones más inquietantes de nuestra cultura. En esta nueva entrega, da un paso más allá: se sumerge en las creencias esotéricas, en los rituales, en los rezos clandestinos que han acompañado —y a veces justificado— la violencia que nos ha marcado como región.
El libro no es ficción. Es crónica, es periodismo, es antropología urbana. Cruz Niño realiza una minuciosa investigación que documenta cómo figuras como Pablo Escobar, lejos de rechazar la espiritualidad, construyeron a su alrededor una red simbólica y ritual que los protegía, los elevaba y les daba sentido. La devoción a Escobar, incluso después de muerto, es tan real como las balas que una vez ordenó disparar.

Pero la obra va más allá del capo colombiano. Nos lleva a México, donde El Chapo Guzmán se encomendaba a Jesús Malverde, el “santo de los narcos”; pasa por Venezuela, donde el Tren de Aragua se asocia con la Corte Malandra, un panteón criminal que recibe ofrendas y respeto; y vuelve a Colombia, donde los rezos a María Lionza, San La Muerte y otras entidades forman parte de la vida cotidiana de sicarios y mafiosos.
El autor no se limita a documentar estos fenómenos. Los interroga, los analiza y propone una reflexión inquietante: ¿qué pasa cuando el mal se disfraza de religión? ¿Qué sucede cuando las comunidades, marginadas y olvidadas, encuentran en lo sobrenatural un refugio o una justificación para sobrevivir al caos?

A través de entrevistas, visitas a lugares de culto, y una narrativa absorbente, Cruz Niño nos invita a mirar donde casi nadie quiere mirar: en el corazón espiritual del crimen. Y lo hace con respeto, sin caer en el morbo fácil, pero sin suavizar la crudeza de sus hallazgos.
“Pablo Escobar y los patrones de la brujería” es una obra tan fascinante como perturbadora. Una lectura que obliga a pensar, que reta nuestros prejuicios sobre lo que consideramos sagrado, y que nos recuerda que en América Latina, muchas veces, la bala y la vela comparten el mismo altar.