18 de agosto de 2023
Actualidad
Con cemento, falsa cirujana cubana operaba a sus pacientes
La supuesta especialista les garantizaba intervenciones estéticas a un costo muy bajo
Por: Redacción SohoDesde hace unos años comenzó a crecer la tendencia de realizarse intervenciones quirúrgicas para lucir mucho más voluptuosas y con curvas extraordinarias, lo que dio paso a que muchos profesionales serios adaptaran sus clínicas y centros especialistas para llevar a cabo este tipo de cirugías sin que se pusiera en riesgo la salud de las pacientes.
No obstante, algunas personas inescrupulosas se han convertido en el terror de muchas mujeres que en medio de su vanidad han caído en sus trampas, accediendo a tratamientos con productos inadecuados y a veces descabellados, confiando en la supuesta experiencia de quienes se los ofrecen
Un vergonzoso caso de estafa
La cubana Oneal Ron Morris, más conocida dentro de su mundo laboral como “La duquesa”, es una mujer que actualmente se encuentra en el ojo del huracán, pagando las consecuencias del daño que le ha hecho a sus pacientes a través de dudosos procedimientos estéticos.
En medio del boom de las cirugías estéticas la estafadora mujer terminó creando una supuesta fórmula mágica que aumentaría al instante el volumen deseado.
Falsa cirujana inyectaba cemento en los glúteos de sus pacientes https://t.co/nCMlWjOMdS
— La Patilla (@la_patilla) August 17, 2023
Lo que llamaba poderosamente la atención de sus clientes era el hecho de ofrecer que quedarían luciendo sus mejores curvas a un precio muchísimo más económico que en cualquier otra parte. Obviamente que ante el deseo de sus clientas de verse más ‘mamacitas’ y con el plus de un precio accequible, más de una hizo fila y se sometió al tratamiento que la cubana ofrecía.
La supuesta especialista cobraba alrededor de 700 dólares por aplicar una mezcla la cual estaba compuesta por cemento (cómo principal ingrediente), pegamento para neumático, silicona y parafina.
Las incautas pensaban que realmente les estaban aplicando la sustancia correcta para agrandar sus glúteos, sin embargo, al cabo del tiempo se comenzaron a percatar de los desastrosos resultados.
Lo que hacía para esconder su ilegalidad
Para evitar que fuera abordada por alguna autoridad competente, Oneal se citaba con sus clientes en diferentes locaciones como habitaciones de hoteles. Allí era donde la mujer hacía sus procedimientos en diferentes zonas del cuerpo, aplicando este compuesto, mientras convencía a sus clientas de qué podían tener unos glúteos firmes y ser voluptuosa en muy poco tiempo.
Bajo esa modalidad de engaño La duquesa duró trabajando alrededor de un año, cuando las primeras pacientes comenzaron a sentir los funestos efectos del famoso tratamiento. Comenzaron los reclamos por parte de sus clientas, quienes presentaban síntomas como inflamación, dolor, malformaciones y otra serie de consecuencias que les afectaba su salud.
Como consecuencia, las mujeres engañadas decidieron denunciarla legalmente, más cuando se supo del fallecimiento de una de ellas a consecuencia de las malas prácticas recibidas por la cubana, tras haberse realizado un procedimiento.
Irónicamente, al parecer La duquesa estaba convencida de que su ‘poción’ funcionaba y ella misma también ser la aplicó en varias partes de su cuerpo. Ahora debe cargar con las consecuencias físicas de sus actos y con las legales, ya que se encuentra pagando por sus diferentes delitos dentro de los que está incluido el homicidio culposo.