31 de enero de 2013

Testimonios

Reivindicación de Ricardo Arjona

¿Cuándo fue que dije que Ricardo Arjona era algo así como Sabina después de la lobotomía? ¿Lo dije en esta revista? Paciencia: todo tiene su explicación.

Por: Daniel Riera

Quería contrariar a la gente que va al gimnasio, y a la gente que va al gimnasio le gusta Ricardo Arjona. Es que a todo el mundo, vamos a decirlo, le gusta Arjona. Bueno, a medio mundo. Ya veremos cómo es este asunto de las mitades. (Reinvindicación del misionero en el sexo)

Arjona cantaba por las monedas de los transeúntes en la peatonal argentina Florida y ahí lo tienen, es una verdadera superestrella. En la Argentina hizo un ciclo de 35 shows en el Luna Park: 245.000 personas. Y eso solo en la Argentina. ¿Han comprendido que el American Dream es posible? 

Arjona, como si esto fuera poco, puso a Guatemala en el mapa. A ver, los lectores no guatemaltecos de esta revista, concéntrense… Guatemaltecos mundialmente famosos que estén vivos, comenzando: ¡Ya! Ricardo Arjona, Rigoberta Menchú, eh, ejem… Tic tac, tic tac… ¡Tiempo! Dos respuestas correctas. Una vez estuve en Guatemala, al cabo de un viaje en bus por Latinoamérica para SoHo, y conocí a la chica más linda del mundo. Me preguntó si me gustaba Arjona. Le dije “claro, cómo no me va a gustar”. Me dijo “a mí me encanta, y además es guatemalteco”. A la chica más linda del mundo, que es guatemalteca, le gusta Arjona. (Reinvindicación del palillo de los dientes)
En una canción llamada De vez en mes, Arjona le cantó a la menstruación. ¿Conocen algún otro cantante romántico que lo haya hecho? Arjona lo hizo. Allí dice, por ejemplo: “De vez en mes / te haces artista / Dejando un cuadro impresionista /Debajo del edredón”. Allí dice, también: “De vez en mes / la cigüeña se suicida / y ahí estas tú tan deprimida / buscándole una explicación”. Si no les gusta, muéstrenme otra canción —mejor o peor, da lo mismo— sobre el mismo tema. No cuentan bandas punk.

Fito Páez tuvo una pelea mediática con Arjona. Polemista experimentado, Fito salió a buscarlo con toda la fe del mundo… y lo encontró. Vamos a decirlo claramente: Arjona lo destrozó. Ni el más acérrimo de los fans de Fito pudo dejar de reconocerlo. Fito tiró la primera piedra cuando dijo: “Si la ciudad [Buenos Aires] le da 35 estadios Luna Park a Arjona y a Charly García le da dos, tenés que pensar qué significan la política, los diarios en esta ciudad, en la que hay valores que fueron aniquilados”. A través de una carta al diario Clarín, Arjona le respondió: “El señor Fito Páez habla de aniquilación cultural y me menciona. De forma sospechosa señala el inicio de este problema en su país casi de manera simultánea con el descenso claro de su capacidad artística (…).

Quiere decir entonces que: si las cosas no le pasan a él, de manera automática pasa el mundo a ser responsable directo del fenómeno (…). Puede ser que usted mismo se crea su farsa de intelectual osado, pero detrás de su arrogancia habita el irrespeto dictador de creerse dueño de las decisiones populares (…). La música no pertenece a las competencias de atletismo donde se miden las capacidades contra reloj, es un asunto de gustos y de emoción. Ante los cinco sentidos de cualquiera que los tenga exactos, sus comentarios no serán más que un alarde melancólico, visceral y resentido de alguien al que solo le queda hablar (…). Ya quiso usted ser Charly García, después quiso ser Almodóvar. Lamentable lo suyo, señor. Lamentable lo suyo, señor, lamentable, pero por sobre todo… triste.” Knock Out. (Reinvindicación de la mortadela)

Arjona, está claro, no tiene medias tintas. No es un apóstol del buen gusto ni un tibio socialdemócrata de la canción como Jorge Drexler o Kevin Johansen, que no pueden disgustarle a nadie. Arjona, amigos, tiene sangre en las venas. Por si hiciera falta decirlo, no es cool ni tiene la más mínima pretensión de serlo. Le importa tres carajos la aprobación de la clase media con pretensiones intelectuales. No escribe para la izquierda ilustrada. Arjona polariza: lo suyo no es, ni mucho menos, música funcional. Si toma martinis, lo hace después de componer y no durante. Hagan la experiencia de viajar en ómnibus con un chofer al que le gusta Arjona: verán que la mitad de los pasajeros canta sus canciones, verán que la otra mitad se quiere matar. Eso es un artista.
Ahora, el argumento más poderoso de todos: a Arjona le gusta Sandro. Es más (es mucho más): la última grabación que conocemos del Maestro fue como invitado en un disco de Arjona llamado Quién dijo ayer, donde cantó el tema Realmente no estoy tan solo.

Sandro grabó muy pocas participaciones en discos de otros artistas. Si aceptó grabar en el disco de Arjona, por algo será. Parece una ironía, pero la letra de la canción que Arjona grabó junto a Sandro dice “Realmente no estoy tan solo, quién te dijo que te fuiste”, y eso, exactamente eso, es lo que nos pasa a los que amamos a Sandro. Como yo. Y como Arjona.

Contenido Relacionado

Testimonios

Yo trabé a mis amigos con una torta de marihuana

"Lo que yo les hice a ustedes aquel domingo de junio de 1980 no tiene nombre ni perdón": Eduardo Arias.

Testimonios

Historia de mi propio aborto por Virginia Mayer

¿Qué pasa por la cabeza de una mujer que toma la decisión de abortar? ¿A quién acude? ¿Cómo asume el procedimiento? ¿Cóm...

Testimonios

Nunca es tarde para el ejercicio

¿Sabía que después de los 40 los músculos empiezan a perder masa muscular y, por ende, fuerza? Si no hace ejercicio, es ...

Testimonios

Humberto de la Calle antes de entrar a la política

¿Sabía usted que antes de ser vicepresidente, ministro o incluso abogado, el actual negociador de paz fue un abanderado ...

Testimonios

Por qué escogí una carrera en pornografía

A Carly Rae su trabajo como actriz porno la salvó de una depresión y le devolvió la confianza. Pero no todo ha sido buen...

Testimonios

Así salí del clóset y me casé

El escándalo sobre las cartillas para fomentar el respeto a la diferencia sexual en los colegios —que ha incluido marcha...

Testimonios

Nairo secreto: 10 cosas que nadie sabía

El periodista inglés Matt Rendell fue, hasta hace unos meses, jefe de prensa del equipo de ciclismo Movistar, y debió vi...

Testimonios

Yo me colé en la final de la Champions (y alcé la copa con James)

Diez filtros de seguridad y miles de policías no fueron impedimento para que el italiano Gaspare Galasso se colara en la...