La guía para ser el polvo inolvidable de una mujer

“El sexo solo es sucio si se hace bien”, dijo el gran director de cine Woody Allen, a propósito de la importancia de explorar al otro en la cama sin tabúes y con una imaginación desbordada.

Si usted es de los que a veces cree que no da la talla en la cama —es normal porque los médicos también se mueren— no hay problema, pero que no se le vuelva costumbre; tendrá que invertirle tiempo a aprender, sí o sí, porque satisfacer a una mujer a nivel sexual no es tarea fácil.

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Lo primero es que entienda que llegar al clímax es importante, pero que ella llegue es prioritario. Y para lograrlo tiene que intentar satisfacer cualquier fetiche que su novia, esposa o amante tenga, a través de la penetración vaginal, el sexo anal o el sexo oral. Como quien dice, una combinación en las formas de lucha.

Recuerde que, en parte, en este asunto los hombres se juegan la dignidad. Y también la posibilidad de repetición.

No decepcione y hágase encantador

Inicialmente, tiene que evitar que tras el encuentro sea calificado como “polvo de gallo”, debe resistir, aguantar y practicar ejercicios para no terminar en el primer minuto.

En la medida de lo posible, use perfume, ropa interior coqueta, tómese el tiempo de besarla antes de ‘manosearla’, aprenda a crear atmósferas románticas e intente cumplirle todas las fantasías más extrañas.

De sexo se habla no solo en la cama

Cualquier lugar es ideal para preguntarle a su pareja cómo le gusta que le hagan en la cama para llegar al clímax. En entrevista con SoHo, Alejandra Quintero, psicoterapeuta de “El Diván Rojo” explicó que es esencial tener esa buena comunicación para lograr la satisfacción de ella. No se preocupe por su satisfacción, de eso deberá encargarse su pareja.

No le dé miedo preguntar, despeje dudas y no dé nada por hecho. “Los hombres, por ser hombres, no se las deben saber todas en el sexo”, eso es un mito, explicó.

Más allá de la penetración

La bella sexóloga, dedicada hace más de 15 años a dar consejos de bienestar sexual, asegura que el hombre debe conocer la anatomía sexual femenina y reevaluar la penetración como principal técnica de estimulación en la cama. “Tienen que ser más juguetones, lúdicos y creativos sexualmente”, apunta.

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Otras mujeres aportan más datos para que no los deje escapar: “la mujer es más de sensaciones. Se trata de que sepan tocarlas, conocerlas, recorrerlas, saborearlas. Y hasta ahorcarla”. Andrea Gómez, una abogada bogotana que confiesa que le encanta la agresividad en la cama, también cree que no hay que quedarse en la monotonía de la penetración. “Que no sea un tema de ‘mete y saca’, sino de que de verdad se sienta el deseo y las ganas, que la satisfacción de la mujer esté en primer lugar”.