11 de julio de 2022
Estilo de vida
Cómo subir las defensas con ejercicio físico
Conozca uno de los beneficios de la actividad física que pocos conocen.
Por: soho.coMuchas personas deciden empezar a hacer ejercicio con la firme convicción de mejorar su forma, bajar de peso, tonificar los músculos o aumentar su resistencia, entre otras razones, pero una de las que más se conoce es iniciar en un estilo de vida saludable, pensando principalmente en su futuro y darle un giro a su presente.
Tener hábitos saludables es una de las mejores decisiones que las personas pueden tomar para su vida. Están quienes desde siempre han mantenido una vida balanceada en cuanto a alimentación y actividad física, pero otras personas que tal vez no le habían prestado mucha atención a esto y que deciden hacerlo después de algunos años de excesos o sin saber cómo cambiar para mejorar.
Por la razón que sea, tener hábitos saludables hará que las personas se mantengan en un mejor estado tanto físico como emocional y metalmente. De hecho, muchos optaron por comenzar a hacer ejercicio o alimentarse mejor tras la situación que atravesó el mundo entero con la llegada de la pandemia de coronavirus.
Con el COVID-19 en el mundo y las restricciones cada vez más fuertes, además de los aislamientos que a muchos les afectaron, millones de personas comenzaron a tomar decisiones en pro de su salud, como hacer ejercicio en casa, alimentarse mejor y hasta aprender a preparar comidas más saludables.
Con la motivación de muchos de empezar a hacer ejercicio por las razones que sean, algunos desconocen que además de mejorar el estado físico, el entrenamiento constante es un gran aliado para el sistema inmunológico de las personas, por lo que fortalecer las defensas es otro de los beneficios de tener actividad física de manera regular.
El blog de Smart Fit destaca que la inmunidad adquirida actúa cuando un factor externo logra superar las barreras que de manera innata nuestro cuerpo desarrolla desde el nacimiento, como la piel, las enzimas de la saliva, los ácidos del sistema digestivo, entre otras.
“La inmunidad adquirida se desarrolla a lo largo de la vida a través de ayudas externas como las vacunas y la exposición a diferentes patógenos durante el crecimiento. Es como nuestro batallón de soldados que está preparado para defendernos y prevenir que las infecciones se propaguen en el sistema”, explica Smart Fit.
¿Cómo fortalecer las defensas?
Smart Fit presenta algunas recomendaciones para que cada persona estimule su sistema inmunológico adquirido.
Actividad física
Es fundamental continuar con las rutinas de ejercicio regular para que no solo se incrementen las defensas del sistema inmunológico, sino que además se fortalezcan las existentes.
Es importante ajustar el entrenamiento físico de acuerdo al nivel de resistencia y con la actividad que cada persona realiza periódicamente. Es decir, no es recomendable que de un momento a otro se haga todo el ejercicio que no se había realizado por años, porque se podría causar un efecto contrario en el cuerpo.
Es necesario tener en cuenta la resistencia de cada persona y, de manera periódica, aumentar su nivel de entrenamiento, a medida que el cuerpo se vaya adaptando a las nuevas rutinas de actividad física.
Alimentación
Fortalecer el sistema inmunológico también requiere de una alimentación sana y balanceada. Vitaminas, minerales y antioxidantes son clave para estimularlo. Por eso no se deben dejar de lado las frutas y verduras. La proteína es igualmente fundamental para fortalecer los anticuerpos. Carnes, lácteos, huevos, nueces, semillas, fríjoles y lentejas, no deberían faltar en las dieta.
Hidratación
El agua apoya las funciones metabólicas y permite la absorción de nutrientes, además, garantiza la correcta hidratación de la mucosa del tracto respiratorio.
Descanso
Explican los expertos que la melatonina, que estimula las nuevas células inmunológicas, trabaja en la noche, por eso es fundamental conservar horarios de descanso y de sueño. Lo recomendable es entre 7 y 8 horas.
Ojo con el estrés
Controlar la ansiedad, buscar espacios de relajación, recurrir a la música, la lectura o la práctica de algún deporte es igual de importante para disminuir los niveles de estrés y exponer el cuerpo a menos riesgos.
*En colaboración con Smart Fit