11 de junio de 2015
Miembro de Número
20 secretos del periodismo
Los periodistas que cubren las giras del presidente suelen viajar en el avión presidencial. Y los cupos son más peleados que un asiento en TransMilenio.
Por: Gustavo Gómez1_ Cuando un periodista habla de un “petardo de regular poder” es que no tiene ni idea del tipo de explosivo del que habla.
2_ Si una mujer es nombrada en una secretaría, no habrá forma de que se hable de ella como la secretaria. Los periodistas se referirán a la señora como la secretaría (con tilde). La mujer será despacho.
3_ Al escuchar en un noticiero de televisión la frase “seguiremos muy pendientes”, de lo que se trata es de que nadie seguirá pendiente del asunto.
4_ Cuando un periodista dice “hay que decir” es que con frecuencia no tiene nada que decir. O le dijeron que dijera.
5_ Los periodistas que hablan de presuntos delitos no hacen sino tratar de cuidarse de una rectificación o posible acción legal. Pero no se libran del error: no hay presuntos delitos; el delito es una conducta típica, antijurídica y culpable, claramente definida por la ley. Presunta comisión de un delito, sí, pero presuntos delitos, no.
6_ Dígase lo mismo de los “controvertidos empresarios” o “controvertidos contratistas”, frases que usa el periodista porque se mete en un lío si dice la verdad: se refiere a ladrones y corruptos.
7_ Si usted oye en radio la frase “con todo respeto”… deje así.
8_ ¿Ha oído que presentan a un “invitado muy especial”? Es un invitado común y corriente. Y si, además, se asegura que “no necesita presentación”, es que no se tienen datos recientes y frescos sobre el personaje.
9_ Si un entrevistado responde diciendo “no sabe cómo le agradezco esa pregunta” es que participó en un entrenamiento de voceros con algún periodista. No agradece la pregunta: le molesta. Y la frase la usa para darse tiempo de pensar.
10_ ¿Ha detectado la incomodidad que produce en la radio decir palabras como teta o culo?
11_ Cuando a un entrevistado se le dice “precisamente para allá iba” o “precisamente eso quería preguntarle”, es que el mal entrevistador va a preguntar lo que acaba de explicar el entrevistado y agotó la munición de dudas.
12_ Una “penosa enfermedad” es una enfermedad terrible que aqueja a la élite. En caso de que la padezca una persona del común, se revelará cuál es y se darán detalles íntimos. No le queda más salida que llover sobre mojado.
13_ Un periodista deportivo felicita a su entrevistado porque el jugador y sus compañeros “mostraron su casta”. Si se juega bien, se tiene casta; si no, ¿los jugadores se convierten en “intocables”?
14_ Cualquier cosa que el periodista no entiende o no puede explicar es un “tema complicado”.
15_ No se moleste si oye tutear a un entrevistado en radio: o se trata de un niño o es un amigo personal del periodista.
16_ ¿Va a leer el periódico un sábado? Proceda antes a retirar los 37 cuadernillos comerciales que le meten en todas las secciones. Una vez hecho esto, le tomará cuatro minutos despachar el contenido.
17_ Si cree que las preguntas en radio son muy largas, tiene razón. Los periodistas ahora hacen siete preguntas en una, con editorial y exposición de sapiencia. Antes se preguntaba para saber; ahora, todo lo que se pregunta el periodista ya lo sabe.
18_ Los periodistas que cubren las giras del presidente suelen viajar en el avión presidencial. Y los cupos son más peleados que un asiento en TransMilenio.
19_ Si un periodista dice, dirigiéndose a un entrevistado, “cuéntenos un poquito…” es que no tiene qué preguntar o necesita rellenar tiempo.
20_ Los periodistas corren a denunciar la corrupción, pero, si la protagoniza un colega, se pierde automáticamente el impulso.