En el extraño Día Internacional de la Contraseña, Google anunció que está pensando en una herramienta que permita unificar el desbloqueo de todas las cuentas que usted tenga a través del celular. ¿Para cuándo?
Letras, números, códigos alfanuméricos, preguntas clave sobre la primera mascota o el nombre de la abuela materna; toda ese enredo a la hora de proteger nuestras cuentas en Internet podrían terminar gracias a un desarrollo en el que está pensando Google para que en el futuro no existan más las constraseñas.
El anuncio de la megacompañía estadounidense se da justo este 5 de mayo cuando se celebra el poco conocido Día Internacional de la Contraseña, propuesto por expertos en ciberseguridad e impulsado por la empresa Intel Security desde 2013 como una forma de recordar buenos hábitos a la hora de crear las claves que protejan desde nuestras redes sociales hasta nuestros dinero en el banco.
Lo que se proponen además los gigantes como Apple y Microsoft, es facilitar la vida a través de un desbloqueo general que se podría hacer en el celular, que sería la forma de autenticar que un único usuario puede acceder a sus contenidos. En los smartphones se podría implementar cualquiera de las alternativas actuales, desde la verificación de la huella, la identificación facial o el tradicional código PIN. Y es que según los fabricantes del iPhone, su sistema de FaceID solo tiene falla en 1 de un millón de casos.
En su página web, Google ha puesto sobre la mesa el cambio que está por venir y aseguró en un comunicado: “Para abordar realmente los problemas de contraseñas, debemos ir más allá de las contraseñas por completo, razón por la cual hemos estado preparando el escenario para un futuro sin contraseña durante más de una década”.
Los cálculos de las compañías de tecnología es que para finales de este años o en 2023 se empiece a implementar esta eliminación de las contraseñas, por lo que Google ya da luces de cómo se haría ese novedoso proceso: “Para iniciar sesión en un sitio web en su computadora, solo necesitará su teléfono cerca y simplemente se le pedirá que lo desbloquee para acceder. Una vez que haya hecho esto, no volverá a necesitar su teléfono y puede iniciar sesión simplemente desbloqueando su computadora”, explica en el comunicado conocido en las últimas horas.
El reto conjunto de los usuarios y empresas será garantizar la seguridad por el peligro que pueda implicar por ejemplo el robo del celular, lamentablemente tan común en nuestros países, por lo que el bloqueo del teléfono va a ser clave. “Incluso si pierde su teléfono, sus claves de acceso se sincronizarán de forma segura con su nuevo teléfono desde la copia de seguridad en la nube, lo que le permitirá continuar justo donde lo dejó su dispositivo anterior”.
Es muy probable que en los próximos meses empecemos a ver pruebas piloto en los sistemas operativos de Android y de iOS para implementar esta tecnología que deberá ser compatible con los otros equipos que usemos, como el computador en el que hacemos nuestras tareas y el televisor inteligente en el que vemos series. El fin de la tortura de las mil contraseñas está muy cerca.
A la espera de que se dé el ansiado cambio que elimine las contraseñas, es importante seguir manteniendo la mayor seguridad posible a la hora de crear esas claves que nos protegen en el mundo digital. Y es que increíblemente la secuencia básica del ‘123456′ sigue siendo una de las contraseñas más utilizadas por los usuarios. Les dejamos algunos consejos para la protección de estos datos:
1. No a las contraseñas básicas, sí a las extensas. La recomendación de Google es tener por lo menos 12 caracteres e intercalarlos con mayúsculas, minúsculas, números y otros códigos que están en el teclado.
2. Cambiar cada cierto tiempo ayuda, pero. Aunque algunos expertos recomiendan el cambio de clave cada tres meses, no está probado que esto ayude a protegernos de ciberciminales, por lo que la principal recomendación es crear una clave fuerte, única y difícil de copiar por otros.
3. Anotar en un papelito. Por más increíble que parezca, no es mala idea tener las contraseñas copiadas en un papel al que podamos acceder fácilmente y que a otros les queda difícil poder encontrar.
4. No repetir. Con el cambio recurrente de contraseñas se ha vuelto habitual que las reciclemos e incluyamos la misma para diferentes cuentas y se vayan rotando. La recomendación es no hacerlo porque quien logre permear en nuestra seguridad podrá por esa vía acceder a otras de nuestras cuentas fácilmente.