Si usted es de los que vive pensando que el tamaño define el éxito en la cama, Lincy Acosta tiene unas palabras para usted.
Por años se ha relacionado el tamaño del pipí con la masculinidad: “Entre más grande y grueso lo tenga, más hombre se es”. Entonces, tal pensamiento trasciende al sexo y ellos piensan que las mujeres buscamos penes enormes para tener la mejor experiencia sexual. (¿Micropene? Los beneficios de tenerlo chiquito)
Lo cierto es que si el tamaño fuese tan importante, todos los hombres se presentarían: Hola, mi nombre es Juan y me mide 23 cm. A las mujeres nos molesta la obsesión por la medida del pipí. Sabemos que no representa el nivel de satisfacción que alcanzaremos en el sexo.
El tamaño sí importa, pero en la medida que complace nuestras preferencias y se acomoda a nuestra anatomía. Me explico: una mujer que no dilate, no alcance una profundidad prolongada o sufra por escasa lubricación durante sus relaciones sexuales, preferirá los pipís pequeños. Un pene grande la maltratará, le inhibirá por completo la lubricación y le hará sentir dolor.
Por otro lado, una mujer que lubrique en abundancia, dilate y alcance una elasticidad bastante prolongada durante sus relaciones sexuales, necesita de un pene grande para llegar al clímax. Por su tamaño, el pipí permanecerá dentro de la vagina durante la penetración a pesar de su excesiva lubricación y eso le permitirá deslizarse con facilidad. (El calzoncillo que le ayuda a acomodarse el paquete)
El tamaño le suma confort a la relación sexual, pero no es un determinante de la satisfacción. Si la medida fuese lo que determina el placer, problemas como la eyaculación precoz o la anorgasmia no existirían.
Ahora, una mujer que prefiera los penes pequeños, también puede divertirse con un pene grande y viceversa. Claro, si el hombre conoce sobre fisionomía y anatomía de la mujer. Me explico, si el hombre tiene un pene grande y sabe ubicar las partes o puntos clave de la vagina pequeña, logrará incrementar la lubricación de ella, que le permitirá una penetración más profunda. Si entiende que su pene la lastima, buscará posiciones sexuales que le permitan una estimulación más placentera a él sin maltratarla. Además, mantendrá una velocidad lenta en la penetración. (10 posiciones sexuales perfectas para penes pequeños)
En caso que el pene sea pequeño y la vagina alcance una dilatación prolongada, el hombre debe saber que la extra estimulación proporcionará más lubricación, lo que facilita la salida del pene durante la penetración, por lo que debe evitar la estimulación simultánea en dos zonas erógenas. También debe buscar posiciones en las que ella permanezca con las piernas cerradas y consiga extra estimulación con prácticas como el sexo anal.
Otro dato importante es que en la penetración la estimulación sexual es generada en el punto g, el cual se encuentra a escasos centímetros de profundidad en la vagina. La estimulación real y contundente la proporciona el clítoris que, de hecho, está fuera de la vagina.
Así que ya sabe, el tamaño solo importa en la medida en que la mujer prefiera uno específico, pero no determina la satisfacción sexual que usted puede proporcionarle. ¿Recuerda la popular frase: “No importa el tamaño, lo que importa es cómo lo use”? Pues, es muy cierta. No alardee del tamaño de su pene, sino de lo que puede hacer sentir con él.