A la hora de la verdad ¿en qué parte es mejor darle besos a una mujer? Besar tiene su ciencia y no es cuento. Lincy Acosta le cuenta donde sí y donde no debería hacerlo.
Podría arriesgarme a decir que una de las cosas que más disfrutamos las mujeres del sexo es el “pre”, ese juego de seducción que existe antes de concretar el coito. Amamos que nuestro cuerpo experimente sensaciones escalofriantes al sentir el roce con la piel de otro cuerpo, el roce con de otros labios. Nos gusta que exploren nuestro cuerpo con besos hasta sus lugares más recónditos.
Sin embargo, siendo lo más sincera posible, existen partes del cuerpo que no nos erizan la piel, no nos excitan y en ocasiones los hombres pierden mucho tiempo en ellas, casi que aburriéndonos y haciéndonos perder la concentración que habíamos logrado hasta el momento. Por eso, hoy decidí contarles qué áreas de nuestro cuerpo generan más placer al ser estimuladas, para que las tenga en cuenta.
Primero, debería saber que hay algo llamado ‘zonas erógenas’: son áreas del cuerpo con gran cantidad de terminaciones nerviosas que al ser estimuladas producen gran placer. Suelen ser tan sensibles que un simple suspiro puede activar los receptores nerviosos, además, es importante saber que el placer producido en ellas con respuestas de carácter psicológico, como el enamoramiento. Los besos bien dados son tiros que dan en blanco y con mucho éxito. Empecemos:
Los genitales son definitivamente una zona erógena, es decir, están casi que diseñadas exclusivamente para producir placer, sin embargo, el “pre” también necesita de la estimulación ajena a los genitales y si este tipo de estimulación es ajustada en su estilo de seducción, seguramente los genitales experimentarán sensaciones que prolongarán y aumentarán la lubricación vaginal.
La entre pierna y la pelvis, son una de las zonas erógenas más estimulantes y excitantes. Si usted es de esos que le encanta hacer masajes para estimular previamente a su pareja, concéntrese en esta área por algún tiempo. Y si esde los que disfruta explorar el cuerpo de su pareja mientras la llena de besos, debe saber que los besos en la entre pierna son altamente estimulantes porque predisponen a la mujer para que quiera que le practiquen sexo oral.
Si ha pensado en el cuello, está en lo correcto. El cuello es sumamente sensible y existen dos formas de estimularlo correctamente. La primera es respirando cerca de él cuándo ella dé la espalda, los besos en la parte anterior del cuello son mortales, pero pierden sensibilidad si los hace por mucho tiempo. La segunda forma es besando sus laterales, porque prolongan bastante la excitación.
Intente llegar a las orejas, otra zona erógena importante y altamente sensible en nosotras, aunque en esta tiene que ser muy cuidadoso al estimularla, porque detestamos que metan su lengua en nuestras orejas y dejen mojado su interior por su exceso de saliva. Procure estimular con la punta de la lengua las orillas de esta y si es mordelón, por favor solo hágalo cuando pase por el lóbulo.
¿Sabía que ustedes pueden producir orgasmos en nosotras solo con la estimulación de los pezones?, sí, los pezones son otra zona erógena a veces olvidada o mal estimulada por los hombres: es delicioso que intenten chuparlos tal como lo haría un bebé, pero no deben olvidar que estos son bastante sensibles y que en ocasiones algunas jamás hemos amamantado, así que prolongar la estimulación podría llegar a ser tormentoso para algunas. Sugiero rodearlos con la punta de su lengua, que no lo hagan tan rápido porque también es incómodo, en especial cuando lo hacen de arriba abajo. ¡Ojo! el pezón no es un saco o una pelota de boxeo, béselos y si quiere morderlos háganlo muy suavemente.
Los labios y la lengua, también son una zona erógena, por eso lubricamos más cuando besamos. Les recomiendo leer sobre la filematología, (o sea, la ciencia del beso) así conseguirán muchas más ideas para combinar diferentes besos y lograr la estimulación que desean, pues los besos ofrecen respuestas fisiológicas y psicológicas.
Por último, pero no menos importante, quiero darles a conocer una de las zonas erógenas que muy pocos hombres conocen, sin embargo, logran estimularla con bastante frecuencia ¿alguna vez ha escuchado a alguna mujer diciendo que ama que la tomen por la cintura y la aprieten contra el cuerpo del hombre?Pues bien, un poco más abajo de la mitad de la espalda, donde el hombre pone las manos para rodearla y sobre toda la columna se encuentra este punto tan sensible: su estimulación es implementada casi que desproporcionadamente en técnicas orientales como el sexo tántrico, las técnicas Karezza, etcétera. Lo ideal es que masajee esta área con la yema de los dedos, puede hacerlo con fuerza e intentar deslizar las manos desde la columna hacia los laterales del cuerpo de ella, así incrementará su excitación de hacerlo en el punto correcto y manipulara el flujo de energías que ella acumula antes de pasar al coito.
Para finalizar, me encantaría hacerles algunas recomendaciones: procure combinar la estimulación de dos puntos erógenos o más simultáneamente, por ejemplo, mientras besa sus pezones puede acariciar sus orejas, o mientras besa algún lateral de su cuello, acérquela hacia usted tomando su espalda y rozando sus genitales con los suyos. También puede buscar ayuda extra: un lubricante caliente no está de más y ella agradecerá si se dedica en serio a la estimulación al menos 10 minutos. Recuerde: la idea es llegar al coito porque ella lo necesita, no porque usted lo forja.