“Le hizo falta ácido fólico”, comentan en las redes.
En redes sociales se viralizó el caso de una influencer que se tatuó el nombre de su novio en la frente y que generó revuelo en la red, desatando toda clase de burlas.
A diario vemos cómo se registran en la red toda clase de noticias, algunas de estas que dejan en evidencia los altos índices de delincuencia por los que pasa el país, como robos, extorsiones o asesinatos, así como también se registran informes sobre accidentes por imprudencias viales o hasta peleas en casos de intolerancia.
Y es que vemos cómo en la red se viralizan toda clase de casos, algunos que por sus curiosos detalles dan muchos de qué hablar.
Es el caso de los reportes de las acciones de mujeres que descubren la infidelidad de su pareja y deciden vengarse, así como también casos en los que las parejas no aguantan la calentura y tiene relaciones sexuales en lugares públicos.
A estos casos virales recientemente se viralizó uno que está dando de qué hablar, todo porque una mujer se tatuó, aparentemente, el nombre de su pareja en la frente, “por amor”.
Se trata de Ana Stanskovsky, una popular creadora de contenido que poco a poco ha venido ganando fama y quien por estos días está siendo noticia por tatuarse el nombre de su novio, ya que “Estoy muy enamorada”.
Aunque su contenido suele ser de humor, sorprendió a muchos al publicar un video en el que, supuestamente, se hizo un enorme tatuaje en la frente.
“Sé que piensas en él ‘qué pasa si terminamos’ y todas esas cosas, pero cada vez que me veo en el espejo, lo amo. Amo el tatuaje y estoy enamorada de mi novio. Y creo que, si realmente amas a alguien, tienes que mostrarlo”, manifestó la joven sobre su tatuaje.
La lluvia de críticas en redes ha generado comentarios como “Tu próximo novio lo odiará”... “Claro que no es real”... “Y si eso no es suficiente, su nombre es Kevin”... “No, esto debe ser una broma” y “Por favor, díganme que no es real”.
Cabe destacar que todo se trataría de una mentira, ya que para muchos la tinta que tiene en la frente es de algún tipo de marcador, sumando que nunca se le puso la piel roja, ante el maltrato que suelen hacer las agujas.