Buscan frenar su propagación
Esta semana se conoció que un estado de Kerala, en el sur de la india, decidió tomar medidas como el encierro con el fin de frenar la propagación de un terrible virus que tiene un alto grado de mortalidad. Su nombre es el virus Nipah y ya ha matado a varias personas.
No es la primera vez que Nipah presenta un brote, de hecho es la cuarta vez desde su primera aparición en el 2018.
El virus Nipah es un virus zoonótico que puede transmitirse de animales a humanos y puede causar enfermedades graves en seres humanos. Fue identificado por primera vez en 1999 durante un brote en Malasia y Singapur, y se ha registrado en brotes posteriores en Bangladesh e India.
El virus Nipah se asocia principalmente con infecciones respiratorias y encefalitis (inflamación del cerebro) en humanos. Los síntomas iniciales pueden incluir fiebre, dolor de cabeza, dolor muscular, vómitos y mareos, que pueden progresar a síntomas neurológicos graves como convulsiones y coma en casos más graves. La tasa de mortalidad puede ser alta, lo que lo convierte en un virus preocupante.
Los murciélagos frugívoros se consideran el reservorio natural del virus Nipah, y la infección en humanos generalmente se produce por el contacto con secreciones o fluidos de animales infectados o el consumo de productos contaminados por el virus. También puede haber transmisión de persona a persona, especialmente en entornos de atención médica.
El virus Nipah es una preocupación de salud pública debido a su capacidad para causar brotes graves y su falta de tratamientos específicos o vacunas disponibles. La prevención se centra en la identificación temprana de casos, el control de la transmisión en entornos de atención médica y medidas de bioseguridad en zonas donde se ha detectado el virus para evitar la propagación a los seres humanos.
La tasa de mortalidad del virus Nipah puede variar significativamente en diferentes brotes y en diferentes regiones. En algunos brotes, la tasa de mortalidad ha sido bastante alta, llegando a superar el 70% en ciertos casos, mientras que en otros brotes ha sido más baja, alrededor del 40% o incluso menos. La tasa de mortalidad puede depender de varios factores, como la calidad de la atención médica, la rapidez con la que se diagnostica la infección y se inicia el tratamiento, así como la virulencia específica de la cepa del virus involucrada.
Es importante tener en cuenta que el virus Nipah es considerado un patógeno altamente peligroso debido a su capacidad para causar enfermedades graves y potencialmente mortales en humanos. Esto lo convierte en un motivo de preocupación para la salud pública, y se han implementado medidas estrictas de prevención y control en áreas donde se ha producido el virus Nipah.
Fiebre: El inicio de la infección por Nipah a menudo está marcado por fiebre alta y dolores de cabeza intensos. Además se presenta un dolor muscular y la debilidad son síntomas comunes.
También las personas contagiadas presentan mareos y confusión acompañada de náuseas y vómitos.
Con el tiempo, la infección por Nipah puede afectar el sistema nervioso central y llevar a síntomas neurológicos graves, como convulsiones y cambios en el estado de conciencia. Esto puede incluir somnolencia, confusión, desorientación y coma.
De igual manera, algunas personas pueden desarrollar problemas respiratorios, como dificultad para respirar.
Es importante destacar que los síntomas pueden ser inespecíficos en las primeras etapas de la enfermedad, lo que puede dificultar el diagnóstico temprano. La encefalitis (inflamación del cerebro) es una complicación grave asociada con la infección por Nipah y puede causar síntomas neurológicos graves y potencialmente fatales.