Las condiciones climáticas en Bogotá siguen siendo alarmantes y cada vez son más las consecuencias drámaticas que dejan las lluvias y los fuertes vientos.
Inundaciones, accidentes y hasta destrucción, son algunas de las consecuencias que está dejando la fuerte temporada invernal por que actualmente atraviesa el país y en especial la capital, Bogotá.
Ya son varios días en los que los aguaceros no dan tregua en la ciudad, pues prácticamente a diario en distintos puntos de la capital se presentan fuerte lluvias y en varias ocasiones las vías se han visto gravemente afectadas por las inundaciones.
No obstante, hace unas semanas también se conoció otro hecho preocupante en el que debido a los fuertes vientos que trae consigo la ola invernal, varios techos en el barrio Galerías al oriente de Bogotá salieron volando ocasionando pánico en los habitantes de la zona.
Así como ese caso, este miércoles se conoció un hecho similar pero que ocurrió al suroriente del centro de la ciudad en el barrio La Cruces, donde aunque esta vez el viento no hizo que los techos salieran volando, sí provocó que este se cayera.
Todo ocurrió en un patio taller del Sistema Integrado de Transporte Público de Bogotá SITP, en el que se estaban resguardando algunos trabajadores de la empresa mientras esperaban que la lluvpia cesara. Sin embargo, en lugar de que las condiciones climáticas mejoraran, empeoraron tanto que el techo del lugar se empezó a desmoronar.
En videos difundidos a través de cuentas de denuncias en redes sociales, algunos de los trabajadores mostraron el aterrador momento en el que las tejas del lugar empezaron a separarse y mientras algunas salían volando otras caían con estruendo al interior del patio incluso sobre algunos buses que estaban parqueados.
A pesar de que varios trabajadores estaban en el lugar durante el drámatico momento, la mayoría de ellos afirmó que en medio del pánico que sintieron pues el viento era bastante fuerte, todos estaban a salvo y no hubo mayores daños.
“Compañeritos esto es lo que pasó aquí en Las Cruces, se cayó todo el tejado. Vino un ventarron grandísimo y se levantó todas las tejas. Bendito Dios todos estamos bien y a los móviles no les pasó nada. Temblamos de miedo pero son cosas de la naturaleza”, dijo uno de los testigos del hecho.
Por supuesto los comentarios no se hicieron esperar, pues aunque muchos manifestaron su preocupación por la situación actual en la ciudad también se quejaron de las terribles condiciones en las que están construidos muchos establecimientos que representan un peligro.
“No pues esos techos pegados con mocos”, “Puro techo barato”, " Es cuestión también de inversión en mejores materiales, estructuras. Claro está, los vientos en la ciudad están tenaz y en el departamento en general”, “Ya era hora que hicieran restauración”, fueron algunos de los comentarios.