Según su relato, el conductor cambió su dirección de destino en Bogotá y la amenazó para que le entregara sus pertenencias.
Hace unos días se conoció el caso de una mujer que pidió un servicio a través de la aplicación de Picap en Bogotá, donde el conductor terminó cambiando repentinamente la dirección de destino para amenazarla y robar sus pertenencias, además de intimidarla asegurando que si no lo hacía procedería a abusarla sexualmente.
De acuerdo con las declaraciones que aparecieron en redes sociales, la pasajera pidió una moto desde el barrio León XIII, en la localidad de Bosa, y el lugar de destino era La Despensa, en el municipio de Soacha. Sin embargo, su preocupación llegó al notar que el motociclista cambió de ruta pasando entre los barrios La María y Los Olivos, que no correspondían con la solicitud que había hecho en la aplicación.
Enseguida, la mujer señaló que recibió amenazas por parte del conductor de la moto, quien mientras se dirigía hacía un lugar apartado en Soacha, la amenazó pidiéndole sus pertenencias y manifestando que de no hacerlo “procedería” sexualmente. Ante esta advertencia, la víctima decidió entregar lo que llevaba y salir a correr.
En medio de su recorrido lleno de angustia, la mujer se encontró con otros ciudadanos que le brindaron ayuda y la llevaron hasta la Policía, donde entregó las imágenes del servicio que solicitó mediante la app con información del conductor.
Con este material las autoridades, la Fiscalía y la Línea Púrpura trabajan en conjunto para dar con el paradero del presunto responsable, además de tramitar una petición de quejas y reclamos para Picap.
El pasado martes 21 de febrero también se hizo una denuncia similar donde una joven manifestó que había solicitado el servicio de transporte, pero la llevaron hasta un potrero, donde forcejeó con el conductor porque habría intentado abusar de ella.
Según su relato, recibió golpes con un casco, le tocaron su cuerpo sin consentimiento y no pudo hacer nada hasta el hombre se apartó. Tras lo ocurrido, la mujer mencionó que llegó gateando hasta una zona cercana a su hogar, sin zapatos y sin chaqueta.