El confeso asesino aceptó todos los cargos. Sus actos en contra de la mujer fueron con total sevicia.
Un nuevo feminicidio tiene de luto al país, en esta oportunidad, una joven de tan solo 18 años de edad, identificada como Paula Andrea Restrepo Parra, fue la víctima de un “enfermo” que acabó con su vida sin mediar palabra alguna.
El homicidio ocurrió en una quebrada de la vereda El Gaitán del municipio de Andes, suroeste antioqueño. La mujer fue sorprendida el pasado 4 de noviembre cuando salía del colegio para su casa.
De acuerdo con los testigos, Parra se encontraba desaparecida desde las 2:00 p. m. por lo que su familia, al ver que no llegaba como solía hacerlo, alertaron a las autoridades locales, quienes en compañía de allegados a los afectados emprendieron una búsqueda para dar con su paradero.
Lamentablemente, sobre las 8:00 p. m. de ese mismo día, la joven fue encontrada en una zona boscosa, a la orilla de una carretera sin vida. Lo más impactante e indignante del caso fue el estado en el que hallaron su cuerpo, que, de acuerdo con la Fiscalía, estaba atada de manos y pies, con lesiones en cuello y cabeza por arma corto punzante y objeto contundente, así como signos de abuso sexual y la razón por la que falleció, señales de estrangulamiento mecánico.
Al conocer lo sucedido, iniciaron una investigación y en casi dos días dieron con el victimario: “El trabajo articulado de la Fiscalía General de la Nación, la Policía y el Ejército Nacional permitió en menos de 48 horas la identificación, captura e imposición de medida de aseguramiento en centro de reclusión contra Carlos Arturo Mora Durán, presunto responsable del delito de feminicidio agravado, tortura y acceso carnal violento”, expresó la Fiscalía a través de un comunicado.
El hombre señalado del feminicidio tiene apenas 22 años y provenía de Labateca (Norte de Santander). Según su testimonio, trabajaba como caficultor en una finca de la zona y se está investigando si le había hecho un seguimiento a la estudiante o si fue algo sin planear.
Cabe mencionar que durante unos exámenes que tenían que hacerle en el hospital San Rafael, para recolectar más pruebas, el señalado se escapó, por lo que tuvieron que dar inicio a un plan candado, mediante el cual lograron capturarlo de nuevo.
Este lunes 7 de noviembre, un juez de garantías envió a la cárcel a Carlos Arturo Mora Durán, quien deberá enfrentar un proceso penal por los delitos de feminicidio, tortura y acceso carnal violento, cargos que fueron aceptados por el acusado.