Vea el video de la confesión acá.
Recientemente, Natalia Améstica, quien previamente fungió como manager del rapero, ha admitido haber sido responsable del asesinato tanto del artista como de su amigo Carlos Molnar, quien también era esposo de Améstica. En una impactante confesión difundida a través de un video viral en las redes sociales, detalló meticulosamente cómo perpetró los crímenes, además de revelar la colaboración de su hermano Guillermo y otros implicados en la alteración del lugar del suceso.
Améstica admitió haber drogado a Tirone González y a Carlos Molnar con diez dosis de un ansiolítico, para luego apuñalarlos en diversas partes del cuerpo hasta causarles la muerte.
En un momento de desesperación, Améstica contactó a su hermano Guillermo para pedir ayuda. Según su testimonio, Guillermo acudió a las 11 de la noche acompañado por tres agentes del Sebin (Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional), cuyos nombres desconoce. Estos individuos habrían intervenido para manipular la escena del crimen, buscando que pareciera un caso de homicidio-suicidio, contradiciendo así la teoría inicial de suicidio que se había planteado.
Améstica también reveló que el cuerpo del rapero fue golpeado con un objeto contundente y posteriormente arrojado desde un edificio en Maracay.
Tras los hechos, aterrada, huyó a Chile, pero luego decidió regresar para hacer estas declaraciones con el propósito de revelar la verdad. Los confesos asesinos enfrentan cargos por “homicidio calificado por motivos fútiles y con alevosía en grado de complicidad”, así como por “simulación de hecho punible”.
Por su parte los familiares del rapero aseguran que no creen del todo en esta confesión y que se nota que hubo presiones por parte de la Fiscalía para lograr esta confesión.
De igual manera, los seguidores del artista rechazan el testimonio de la mujer, pese a que si creen que fue asesinado no le dan crédito a esta confesión.
Falta ver que arrojan las investigaciones por parte de las autoridades luego de que se conoció esta explosiva confesión.