En un mensaje a través de su cuenta de Instagram, el ministro contó sobre el particular trastorno de bipolaridad política que está sufriendo.
El trastorno bipolar está definido como una enfermedad mental en la que aquel que la padece vive episodios extremos en su estado ánimo, pasando de la depresión a la euforia de forma inusual. En el caso del ministro de Educación, Alejandro Gaviria, ese trastorno lo está padeciendo pero desde la política.
El tranquilo académico que quiso meterse en el frenesí de participar en el actual Gobierno, publicó una foto para enviar un mensaje sobre los mensajes llenos de insultos que le llegan y que no se ponen de acuerdo para definirlo.
En su cuenta de Instagram, Alejandro Gaviria publicó una foto suya viendo el celular desde lo que parece ser una sala de juntas y escribió: “Abrí Twitter unos segundos y casi me sobreviene una crisis de identidad. Para unos neoliberal, para otros mamerto”.
El mensaje del ministro tiene una motivación y es la controversia en la que ha estado inmerso desde hace varias semanas por la reforma a la salud. Primero se conocieron detalles de sus desacuerdos con el texto presentado por su colega Carolina Corcho, con quien ha tenido viejos desencuentros, pero luego él mismo publicó un tuit en el que aseguraba que “seguía firme” con el presidente Petro.
Las dos posiciones le han valido mensajes desde orillas de izquierda y de derecha:
Y aunque durante la última semana estuvo sobre la mesa la posibilidad de que Gaviria renunciara a su cargo, él negó esa posibilidad y simplemente aclaró esa crisis de identidad que estaba sufriendo, explicando lo que él cree que es: “Simplemente un liberal que descree de las pasiones políticas más recalcitrantes”.