Tenía 23 años y quería mejorar su figura.
Laura Sofía Amaya era una joven colombiana de 23 años que vivía desde hacía un par de años en España y que por gastos y fama decidió someterse a una cirugía en nuestro país.
Pese a que su prima, quien también se había operado recientemente con la misma persona le recomendó un día antes no hacerlo, la joven decidió no desistir de la idea de practicarse una lipoescultura.
Y es que en diálogo con Caracol Televisión, Gabriela Duarte, prima de la joven contó que meses atrás ella también se había practicado la misma cirugía con Brenda Selecta, una mujer que en redes sociales asegura ser médica esteticista.
Duarte señala que Selecta no tiene un centro médico para practicar estas cirugías y que las hace en un salón ubicado en el barrio el Restrepo. Además, contó que cuando ella se operó con la mujer tuvo varias complicaciones y perdió peso de manera exagerada por eso le sugirió a su prima no operarse con esta persona.
Laura Sofía Amaya había enviado el dinero de la operación, 7 millones de pesos que fueron cancelados días previos a la cirugía. El día 15 de septiembre entró a cirugía y tuvo varias complicaciones, con el agravante de que la joven se cayó de la camilla, según relata la familiar de la víctima.
“Las convulsiones aumentaron y Sofía se comenzó a torcer. Por eso la llevaron a la Clínica el Olaya y allá sus signos vitales eran muy bajos. La entubaron, pero ella no sobrevivió”, relato Duarte.
Según la familiar de la víctima son varias las mujeres que han sido víctimas de esta mujer que hasta el momento no ha aparecido a responder por la muerte de la joven.
Por su parte, los familiares de Laura Sofía Amaya ya pusieron la respectiva denuncia en la Fiscalía a la espera de que a mujer responda por lo ocurrido el pasado 15 de septiembre en el barrio el Restrepo de Bogotá.
Datos de la Secretaría de Salud de Bogotá, durante lo corrido del año se han registrado siete mujeres de mujeres ocasionadas por cirugías estética y Laura fue la víctima número 7.
Aunque la historia de esta mujer les recuerde a muchos los casos de las famosas colombianas que han sido víctimas de los biopolímeros, esta no fue precisamente la sustancia que le inyectaron en sus glúteos, sino una mucho más mortal que se obtiene de la mezcla de silicona industrial con la resina de polimetilmetacrilato (PMMA), un plástico que en el mundo de la medicina se utiliza para la fabricación de prótesis oseas y dentales, señala el portal Grupo Gamma.
A raíz de esto la influencer brasileña Lygia Fazio, madre de dos hijos, perdió la vida a sus 40 años de edad en un hospital de Sao Paulo luego de sufrir un derrame cerebral como consecuencia directa de la cirugía de aumento de glúteos que se había realizado hace tres años atrás, exactamente en el 2020.
Los especialistas detectaron que el PMMA ya se había extendido por todo su organismo causándole diversos problemas y generando la proliferación de bacterias.
Por esta razón, los últimos meses de vida de la influencer brasileña que también había trabajado como periodista en un programa de televisión, estuvieron marcados por una constante lucha que, lamentablemente, llegó a su fin.