La discusión por el aumento del salario mínimo avanza y los representantes de los trabajadores piden un alto incremento. ¿Es posible?
Desde hace varios meses el país está a la expectativa de lo que ocurrirá con el salario mínimo en Colombia y su aumento para el 2023 que empezó a discutirse de manera oficial hace algunas semanas, pero hasta el pasado viernes se conoció la primera propuesta.
Tal como lo establece la ley, la negociación para este tema debe llevarse a cabo entre tres sectores como los son el gobierno, representado por el Ministerio de Trabajo y otras entidades como el Ministerio de Hacienda, Comercio y Agricultura y el Departamento Nacional de Planeación (DNP); los empresarios en cabeza de varias agremiaciones y, finalmente, los trabajadores que son representados por organizaciones sindicales.
Precisamente, el pasado viernes 9 de diciembre los representantes de los trabajadores emitieron su propuesta para el aumento del salario mínimo y la sustentaron en que es lo mínimo considerando la alta inflación por la que atraviesa el país que le está quitando poder adquisitivo a los colombianos.
En ese sentido, las centrales obreras proponen un aumento del 20 % que sería lo mismo que 200 mil pesos sobre el valor actual para dejar el salario en 1 200 000 sin auxilio de transporte, ya que esta propuesta debe ser aparte.
No obstante, frente a ese 20 % expertos muestran preocupación y dudas, ya que aunque si bien es cierto que la inflación en el país es alta, un aumento tan drástico tendría más efectos negativos que positivos en la economía del país y, por supuesto, en el bolsillo de los colombianos.
En primer lugar, los expertos recomiendan que el salario no suba porcentaje muy superior con respecto al dato de la inflación en Colombia para noviembre que estuvo en 12.53 % sumado al dato de productividad que fue del 1.24 %.
De esa manera, según la Anif, lo ideal es que el salario mínimo suba solo un 13.8 % como máximo, pues, de lo contrario no solamente la inflación podría ser peor, sino también el desempleo.
Según lo dicho por Aliadas, grupo de asociaciones y gremios, el incremento del salario mínimo debe acogerse a las capacidades de los empresarios, ya que aumentarlo demasiado podría generar números rojos en temas de contratación, por lo que el empleo formal se vería imposibilitado a crecer y por el contrario el desempleo sería más alto.
Por ahora, no se sabe cuál es la contrapropuesta de los empresarios que tienen plazo máximo de definirla hasta el 15 de diciembre.