En un universo donde el lujo, la moda y el arte se entrelazan de manera sublime con esta presentación.
Ice Chalet, es una exclusiva edición limitada no es solo un whisky, sino un manifiesto de sofisticación y estilo, concebido en colaboración con la prestigiosa marca de moda de lujo A Perfect Moment.
Ice Chalet es el resultado de una meticulosa selección de malta proveniente de las destilerías más altas y frías de Escocia, cuyo entorno natural —la pureza del aire de la montaña, la frescura de la nieve y el calor de los fuegos— se plasma en cada gota de este destilado único. Esta edición es un lujo en sí misma, ya que solo una de cada 10,000 barricas alcanza la perfección necesaria para formar parte de la legendaria línea Blue Label.
Esta edición tiene como objetivo evocar la temporada más fría de Escocia para lograr una maduración más lenta, lo que le confiere una textura más delicada y sutil, destacando las notas características del ADN de Johnnie Walker, como el suave toque ahumado y las notas frutales. Al madurar en un entorno frío, el whisky adquiere una suavidad y elegancia excepcionales en el paladar. Su fortaleza y distinción provienen de la combinación de tres single malts excepcionales: Brora, GlenAllachie y Dalwhinnie. Esta última, la destilería más alta de Escocia, se encuentra a 365 metros sobre el nivel del mar, lo que confiere una singularidad especial a la línea Blue Label Ice Chalet.
Pero la experiencia de Ice Chalet no se limita al paladar: su diseño es una obra de arte en sí misma. La botella, acompañada de una sofisticada bolsa reversible diseñada por A Perfect Moment, trasciende el concepto de bebida para convertirse en un accesorio de lujo. El clásico estampado de pata de gallo, reinterpretado con un giro contemporáneo, es una declaración de estilo y elegancia que hace de esta botella un objeto de deseo tanto para los amantes del whisky como para los de la moda. Esta colaboración no solo celebra el buen gusto, sino que redefine lo que significa disfrutar de una experiencia sensorial completa, donde la moda, el arte y el whisky se encuentran en su máxima expresión.