Sus responsabilidades económicas respecto al pago de sus facturas pueden variar de acuerdo a sus prácticas. ¿Preparado para cambiar sus hábitos de consumo?
En los últimos años, después de la crisis sanitaria que se vivió a causa de la pandemia por el coronavirus, el alza que se viene presentando en las tarifas de los servicios públicos es uno de los asuntos que más preocupación ha generado en los hogares colombianos.
Y que las facturas se han visto directamente afectadas no solo por la situación que se desencadenó con este virus que azotó a la humanidad, sino también por el conflicto entre Ucrania y Rusia que, sin duda alguna ha tenido un gran impacto en el mercado del gas y el petróleo en Europa y, como consecuencia, en el resto del planeta.
Debido a esos cambios en variables fundamentales de la economía, se ha originado una inflación generalizada que se ha visto reflejada no solo en los aumentos de los servicios públicos, sino también en otros productos y servicios, incrementos por los que muchos están buscando la manera de ahorrar en las facturas para que sus ingresos puedan rendir un poco más y así tener la posibilidad de cubrir todos sus gastos sin que alguna de sus responsabilidades económicas se vea afectada.
Por esta razón, es necesario entender cómo funcionan los consumos para evitar pérdidas, aprender a revisar instalaciones y cambiar los hábitos de consumo en cuanto al uso del agua o la luz que pueden resultar siendo un cambio muy importante a la hora de iniciar el ahorro en las facturas de los servicios esenciales en el hogar.
Una vez se tengan en cuenta los factores mencionados anteriormente, seguramente empezará a sentir un cambio en su salud financiera bastante positivo, así como sus hábitos de un consumo más consciente y benéfico no solo para su bolsillo, sino también para el mundo.
A continuación, señalamos algunos consejos que le ayudarán a poner en práctica su modo ahorro en la factura de la luz y el agua:
Es importante recordar que los precios varían de acuerdo al tipo de mercado entre regulado y libre; donde el primero se entiende como la actualización de la tarifa de manera diaria que se puede consultar en Red Eléctrica, como es el caso de España, o el mercado libre donde la tarifa es la que se pacta con la compañía comercializadora que también puede tener algunos cambios por las franjas horarias, donde algunas suelen ser más caras.
Cuando se entienda el consumo y los detalles de la tarifa contratada con el proveedor de electricidad o gas natural, entonces se podrán cambiar los hábitos de consumo a favor del hogar.
“Mediante un estudio sencillo podemos sumar potencias y con base en ello, contratar el factor de potencia. Este puede contratarse hasta en tres franjas, según la distribuidora, y nos permite que, en cada período del día, nuestro factor se ajuste a lo que consumimos”, explica Javier Martínez Moronta, arquitecto y profesor del máster de gestión ambiental y energética en la Universidad Internacional de La Rioja (UNIR).
Estas son algunas de las medidas más sencillas que puede empezar a poner en práctica para reducir el consumo de la factura de la luz. De acuerdo con el Energy Saving Trust de Reino Unido, apagar las luces cuando no se necesitan puede suponer más de dos euros de ahorro al mes.
Por otro lado, contar con electrodomésticos que dispongan de una calificación energética de bajo consumo genera importantes ahorros. Recuerde que la lavadora debería permanecer desconectada mientras no se use.
Pese a que algunos aparatos que hay en la casa no tienen un gran consumo de electricidad, sí pueden llegar a gastar más de lo que deberían como en el caso de los celulares que ya están al 100 % de su batería, pero siguen conectados, pues aún así seguirán consumiendo energía.
“Los aparatos que podemos desenchufar como cargadores, lámparas o pequeños equipos tienen un consumo pequeño, pero pueden ahorrarnos entre un 5 % y 8 % de la factura anual”, explica Martínez Moronta.
Para ello es importante no exceder el tiempo de teletrabajo al que tiene de forma presencial. “Así, todo lo que necesitemos para teletrabajar lo podremos tener bien gestionado y programado”, añade el profesor de la UNIR.
Hoy en día son varias las personas que se quieren sumar a este hábito que además de ayudar a su bolsillo, también tiene unas razones sociales y medioambientales de peso. Por eso se recomienda cerrar el grifo durante el enjabonado o el cepillado de dientes, reducir el tiempo de las duchas, contar con cisternas de doble descarga, lavar los utensilios de cocina usando un recipiente o llenando el fregadero.