No está lejos de Colombia y tiene unas playas hermosas.
Anguila, es uno de los destinos más bellos del Caribe, y no en vano está siempre entre los listados de las mejores del año por Condé Nast, Travel & Leisure, Travel Channel y los World Travel Awards, entre otros.
Sus 33 playas de aguas turquesas y arena blanca invitan al descanso y a la diversión. La industria hotelera de la isla está entre las mejores del mundo, así como su gastronomía: hay opciones para todos los bolsillos. Anguilla cuenta con spas de lujo y ofrece una amplia gama de deportes acuáticos y de aventura. Se puede atravesar la isla de un extremo al otro en 45 minutos en carro.
Al ser territorio británico de ultramar, su idioma oficial es el inglés y, aun cuando su moneda oficial es el dólar caribeño, se reciben dólares americanos en todos los establecimientos.
Es posible alquilar carros o cuatrimotos, hay servicio de taxi y muchos hoteles ofrecen bicicletas, lo que es muy cómodo porque la isla es plana y llena de rincones por explorar.
A este paraíso se llega desde Colombia vía Miami. En este caso, un vuelo Miami-Anguilla tiene una duración de 2 horas 50 minutos.
Vía Panamá, St, Marteen desde donde se toma un ferry de tan solo 20 minutos de navegación. Estos ferrys salen cada 45 minutos y resultan ser una excelente opción.
También es posible llegar a Anguilla Colombia- Puerto Rico. Desde donde se toma un vuelo a la isla, con una duración de una hora aproximadamente.
Los colombianos pueden ingresar sin problema si cuentan con la visa americana vigente. Si no es así, deben tramitar vía online la visa de Anguilla en el siguiente link https://evisa.gov.ai/. La cual tiene un valor de US$140 dólares por un solo ingreso.
La oportunidad de hacer kayak de noche no se presenta muy a menudo. El agua cristalina de Anguilla hace que la experiencia sea aún más especial y aventurera ya que los kayaks cuentan con luces neón en el fondo que iluminan el camino. Puede presenciar a las tortugas durmiendo en el fondo del océano y ver cómo las langostas se arrastran por el fondo buscando refugio. Esta experiencia está llena de momentos Instagrameables ¡sin duda, un must para no perderse!
Los primeros registros de la recolección de sal en el estanque de Road Bay se remontan a la década de 1600. A principios del siglo XX se creó una industria en torno a la abundancia de sal natural que se convirtió en una importante fuente de ingresos para Anguilla. Conozca los matices de la historia y la ciencia que se esconden bajo la superficie en el estanque de Road Bay. Y, claro, participe en esta actividad recogiendo sal con los mismos instrumentos que se utilizaban en 1600.
Camine y escale a través de Katouche, una finca de 32 hectáreas que comprende una de las experiencias vitales más diversas de Anguilla y a la que a menudo se hace referencia como la “selva tropical” de Anguilla. Es el único lugar de la isla donde los árboles se elevan en lo alto y el follaje, que suele ser de matorral bajo, crece hasta varias veces su altura. Sube a la cueva Katouche y aprende todo sobre el roedor de 226 kilos que una vez habitó este lugar.
¿Alguna vez se ha preguntado cómo es el mundo submarino de Anguilla? Sumérjase a 24 metros de profundidad en el naufragio “MV Sarah”, uno de los muchos buques hundidos para formar arrecifes artificiales. O bien, navega por el terreno submarino y sea testigo de la belleza y la tranquilidad del mundo subacuático.