El periodista deportivo decidió expresar su frustración por medio de sus redes sociales
Las empresas que presentan ciertos servicios de telefonía o aquellas que ofrecen algunos planes de televisión pueden llegar al punto de reventar a una persona. Y es que si bien todo comienza como un cuento de hadas, una vez contratado el servicio y se necesita asistencia las cosas comienzan a tornarse oscuras, pues la atención al cliente no es que sea la mejor.
Así como muchos usuarios lo han hecho, en esta ocasión fue uno de los más reconocidos periodistas deportivos el que decidió quejarse a través de sus redes. Se trata de Iván Mejía, quien cansado de estar recibiendo llamdas por parte de la empresa DirecTV publicó un trino expresando todo su descontento con esto.
“Señores Direc tv cuando necesite el servicio no lo prestaron y me maltrataron haciéndome perder horas buscando asistencia. Entre ayer y hoy me han llamado cinco veces. No más, no quiero saber nada de ustedes son ineficientes y prestan un pésimo servicio”, sentenció.
Sin embargo, cabe señalar que esta no fue la primera vez que Mejía se quejó en contra de esta empresa que ofrece paquetes de televisión. Esta ya es una historia que data desde el pasado 29 de diciembre del 2022, cuando el periodista publicó un trino en el que se quejaba, precisamente, por la atención al cliente: “El servicio al cliente de DirecTV es una porquería. Es imposible encontrar soluciones con robots o descerebrados”.
Y es que si bien en esa primera ocasión no pudieron encontrar una solución, lo cierto es que los clientes tienen un límite y Mejía ya no estaba para más pérdidas de tiempo, porque en muchas ocasiones en esto se convierte hacerle un reclamos a este tipo de compañías, quienes primero ponen a un robot a que los atienda, para después comunicarlos con una persona que no tiene la solución adecuada o que lo pasará de departamento en departamento a ver si hay alguien que logre hacer algo para solucionar los inconvenientes que se presentan.
Este tipo de problemas se presentan todos los días y son pocas las empresas que le han puesto la lupa a mejorar su atención al cliente. Al final, son estos los que terminan pagando y no por hacerles un favor, sino por recibir un servicio adecuado y que cumpla con las expectativas de los qeu prometen.