En medio de una conversación con los presentadores del matutino ‘Día a día’, el periodista reconoció el peligro que corre en las calles de Bogotá mientras ejerce su labor.
Edward Porras se ha convertido en uno de los periodistas más queridos y admirados por los televidentes que hacen parte del equipo de Noticias Caracol. Su labor es estar atento a lo que ocurre en Bogotá mientras la mayoría de ciudadanos descansa.
En el informativo lo presentan como ‘El ojo de la noche’ y su particular manera de presentar sus informes es lo que ha hecho que día a día se gane el cariño y el respeto de la audiencia. Además, muchos aplauden su labor porque son conscientes del peligro que representa el hecho de trabajar en horas de la noche en la capital colombiana, más aún cuando la mayoría de sus reportajes están relacionados con hechos de inseguridad.
Por esta razón, en medio de una conversación con los presentadores del matutino ‘Día a día’, del Canal Caracol, reveló cuál es su secreto para que no lo roben mientras ejerce su labor, pues es un dato que a muchos espectadores les genera inquietud.
En este espacio de entretenimiento que se emite de lunes a viernes, Edward Porras explicó que nunca sale a cubrir sus informes solo gracias a que cuenta con un equipo de trabajo conformado por otros tres hombres; un camarógrafo, un asistente de cámara y un conductor.
Ellos cuatro recorren la capital de norte a sur y de oriente a occidente en busca de noticias, además, reveló que su hora laboral comienza a las 9:00 de la noche y termina a las 5:00 a.m.
Por otro lado, mencionó que la ruta la planea él desde temprano para tener su primer informe de la noche y reconoció el peligro al que se exponen porque deben acudir a zonas bastante peligrosas, precisamente para mostrar a la ciudadanía lo que realmente ocurre en la ciudad mientras la mayoría descansa.
El periodista señaló que en algunas zonas también cuentan con el apoyo de las autoridades, pero cuando definitivamente no pueden contar con su presencia su táctica es la siguiente: el camarógrafo se ubica justo al lado del asistente para grabar los hechos, mientras él se hace en una esquina desde la que busca información y al mismo tiempo está pendiente de su camarógrafo.
Desde el vehículo el conductor está pendiente de los tres y usualmente busca poder parquearse en una calle con buen movimiento de tráfico en caso de que se presente alguna urgencia. Como si fuera poco, también tienen todo planeado en caso de que alguno se pierda.
Según Edward Porras, lo primero que hacen cuando no encuentran a uno de sus compañeros es comunicarse, pues todo el tiempo buscan no quedar expuestos a los peligros que representa la calle en horas de la noche.