Un particular hincha que se goza a grito herido los goles de la Selección
La pasión del fútbol despierta la atención de todo tipo de seguidores quienes en medio de la emoción por cada encuentro de la Selección sacan a relucir de diferentes maneras lo qué significa apoyar a nuestros jugadores.
Así vemos camisetas, caras pintadas con los colores de la bandera, peluches, banderas disfraces, etc., todo por apoyar a ese equipo que durante 90 minutos se la juega por dejar en alto a nuestro país.
Pero lo que tal vez no se podía uno imaginar es que hasta la mascota de la casa se viera involucrada en cada celebración y ese es el caso de Texano, un lorito muy especial que se ha convertido en el hincha número uno de la Selección Colombia.
Cada quien tiene su manera de vibrar con el futbol y mientras unos cantan, gritan e incluso lloran, Texano, un lorito de 10 años que vive en Arjona, Bolívar, tiene su forma particular de apoyar al equipo.
El ave se ha vuelto el seguidor número de uno cada vez que el equipo juega. Esta ave ha perfeccionado lo que escucha y a todo pulmón celebra los goles de la ‘Selección con un“¡GOOOOOOOOOL!, de Colooooombiaaaaaa”.
Los vecinos y su dueña, Carmen Emilse Pájaro, afirman que esto lo ha aprendido porque ellos acostumbran a ver las transmisiones de los partidos por el canal Caracol y que ha aprendido su particular estilo del ‘cantante del gol’ Javier Fernández.
Uno de los vecinos, narró al medio como el loro empieza a gritar una vez rueda la pelota los 90 minutos. “El loro cuando ve el partido de Colombia le da una emoción, no sé. Parece como si fuera una persona. Y apenas que narran el gol, él enseguida: ‘Goooooool’”, indicó.
Otro admirador, quien es narrador de fútbol, aseguró que le sorprende la capacidad de tonalidad que alcanza el ave. “En realidad cuando usted sube, goooooool y el loro tiene esa media, ¿ah? Sin duda es extraordinario”, dijo en entrevista con Noticias Caracol.
Texano es un lorito de un pelaje verde, con una que otra tonalidad roja, su cabeza es de color amarillo intenso como el sol y sus ojos color miel. Se ha convertido en el compañero inseparable de quienes disfrutan con los partidos de la Selección en su vecindario.
Para ninguno de ellos se disfrutaría de la misma manera un partido si Texano no estuviera presente para gritar los goles de la Selección, así que de aquí en adelante tendrá que seguir entrenando su voz porque lo que tiene es bastante trabajo, pues apenas empiezan las eliminatorias hacia el Mundial del 2026.
No cabe duda que es todo un personaje y que se ha ganado el cariño de sus vecinos. Por eso su dueña nunca ha pensado en venderlo o regalarlo a pesar de las ofertas que ha recibido. “No, no lo vendo. Porque este es aquí una reliquia de la casa”, dice Carmen Emilse.