Se dejó ver como muy pocas veces y puso a sudar a más de un fan.
Por medio de su cuenta de Instagram, Sofía Vergara publicó una foto en la que se quitó la ropa para sacar seductora selfie, viéndose más bella que nunca a las 50.
Desde siempre Sofía nos ha enamorado con sus curvas y derrochadora personalidad, siendo de las colombianas más queridas.
Aunque inició en la farándula colombiana, fue realmente con su llegada a la televisión de EE. UU. que su nombre empezó a ganar reconocimiento a nivel internacional.
Con su talento actoral, la barranquillera se convirtió en una de las actrices colombianas que mayor éxito ha logrado internacionalmente. Tanto así, que en su momento fue reconocida como la actriz de televisión mejor paga en los Estados Unidos.
Tal es la fama que tiene, que incluso le han realizado muñecas de cera de un afamado museo.
A sus 50 años, la actriz sigue siendo de las más queridas y de las mujeres que más suspiros genera gracias a sus imponentes curvas, dotes con los que deja a cualquiera boquiabierto con su paso.
Con la fama que ha logrado por su trabajo en televisión, su personalidad y figura, es que hoy por hoy cuenta con un gran número de fans en redes sociales; tal y como se puede ver en los más de 27 millones de seguidores que suma en su cuenta de Instagram.
Por esta plataforma, además de mostrar algunos detalles de su vida, suele dejar ver algunas fotos donde destaca su belleza. Así se pudo ver en una reciente publicación, en la que demostró el cuerpazo con el que se sigue robando las miradas.
De hecho, recientemente, la barranquillera aprovechó su perfil oficial para dañar la imaginación al publicar una foto en la que se le puede ver con muy poca ropa.
Para la imagen, Sofía se tomó una selfie mientras se encontraba en ropa interior, por lo que dejó en evidencia sus exuberantes curvas con las que llegó a dañar la imaginación a más de uno.
No hay duda del cuerpazo de la artista y solo es necesario darse un paso por sus redes sociales para quedar cautivado.
Como la vez que dejó ver su figura mientras disfrutaba de una tarde de sol, luciendo un traje de baño atigrado que provocó malos pensamientos.