La modelo libanesa habló de su pasado en la industria que la llevó a la fama.
Mia Khalifa se ha convertido en el sueño de millones de personas alrededor del mundo por sus grandes atributos e increíble sensualidad. Esta libanesa es considerada una diosa del cine para adultos hace años. Primero, por su trabajo en las películas xxx y ahora por su espectacular contenido en OnlyFans.
Su carrera empezó en el 2014 cuando se convirtió en estrella del cine para adultos. Su vida cambió cuando recibió una curiosa invitación de alguien cercano que la fue metiendo en este mundo. En ese momento, esa persona la fue metiendo en este tipo de entretenimiento para ser una estrella porno, sin imaginarse que llegaría a ser una de las que mayor éxito ha tenido en la industria.
Según comentó Mia en una entrevista, la invitación “no fue ‘Oye, ¿quieres meterte al porno?’. Fue más un ‘Eres hermosa, ¿te gustaría modelar un poco? ¿Sabes?, tienes un gran cuerpo y creo que serías genial para modelar’”.
Sin embargo, hace poco decidió hablar un poco más de ese mometno en que empezó a meterse en esto y a ver que la vuelta atrás y todo indica que esta no era la idea que tenía para su vida y que no la pasó tan bien como podría llegar a pensarse.
Recientemente, la modelo relató como un romance la terminó llevando por el camino del porno. Cuando era adolescente un romance con un militar se fue convirtiendo en una relación “tóxica”. Según Mia, el sujeto la manipuló y la trató “como un juguete”.
Sus declaraciones se deben a que esta persona le sugería grabar material porno. “Era una relación en la que siento que muchas chicas entran cuando están en su adolescencia”, lamentó. Además, describió a esta persona como “extremadamente abusivo”.
Cuando cumplió los 18 años se casó con él y con 20 fue presionada para que se metiera por completo a hacer pornografía. “Puso todo ese mundo frente a mí y lo alentó. El consenso fue: ‘Deberías hacerlo, creo que sería genial’”. De acuerdo con Khalifa, este personaje obtendría a cambio “fetichismo”.
El medio La Tercera compartió los pensamientos de Mia respecto a la decisiones en su vida como la de incursionar en el mundo xxx. Según ella, tomó “muchas decisiones que no puedo retractar” y la de entrar al cine para adultos fue “una de las más grandes”.
La libanesa trabajó varios años en esta industria hasta que un polémico video la llevó a lo más alto, pero también la metió en problemas y la terminó sacando del mismo. En este, salía ella portando un hiyab islámico (el pañuelo usado por algunas mujeres musulmanas para cubrirse la cabeza). Tras usarlo, recibió amenazas por parte del Estado Islámico (EI).
Y aunque en un principio su popularidad fue por la polémica, con el pasar del tiempo fue por su voluptuosa figura y el sugerente contenido que grababa, con el cual empezó a tener fama a nivel mundial. Sin embargo, dejó toda su carrera en el cine XXX y se dedicó a las plataformas digitales.
Uno de los principales motivos por los que se alejó del porno fue por las fuertes amenazas que recibía por parte del Estado Islámico. “Después de dejarlo, mi cuenta de Instagram fue hackeada por simpatizantes de EI, que publicaron propaganda por todas partes. Así que Instagram la eliminó y no me hice una cuenta nueva hasta un año después, cuando decidí aceptar mi destino como la infame exestrella porno e intentar cambiar la narrativa”, aseveró en entrevista con la BBC.