Esta es de esas mujeres que demuestra que el tiempo no siempre es el enemigo.
Como el vino, así podemos definir a Jennifer Aniston. La famosa actriz de Hollywood lleva décadas deleitando a sus millones de fanáticos con sus encantos. Su cabello rubio y delgada y tonificada silueta han sido el sueño de muchos por mucho tiempo.
Jennifer se hizo famosa a nivel mundial por su personaje en la exitosa serie de los 90, Friends. En esta se convirtió por una década en Rachel Green. Una joven adinerada que la vida le da una vuelta y termina rearmando su vida.
Además de este personaje, Aniston se ha forjado una carrera en el mundo de las comedias románticas. Por ejemplo, entre las mas conocidas aparecen Una novia de mentiras, Todopoderoso, Viviendo con mi ex, Marley y yo, Misterio a bordo o Cómo acabar con tu jefe 1 y 2.
En su vida artística han resaltado dos aspectos aparte de las películas y programas de televisión en los que ha participado; su vida personal y su sensualidad. Por un lado sus relaciones amorosas le han dado la vuelta al mundo. Por ejemplo, la que tuvo con Brad Pitt hasta que este la dejó por Angelina Jolie, la que tuvo con su compañero Vince Vaughn o la que tuvo con Justin Theroux.
Con el tiempo, una de las mujeres mas sexys del mundo se convirtió en la novia de Hollywood. Jennifer fue catalogada como la más sexy de todas desde 1996. Ha ocupado este lugar en diferentes oportunidades, como en 2010, 2009, 2008 y 2011.
Y no es para menos, ‘Jen’ tiene una sensualidad que aún resalta a los 54 años de edad y una prueba de esto es su apariencia en los últimos años. Su belleza siempre ha resaltado, su cabello castaño y y ojos azul claro la convirtieron en un ícono de la cultura.
Hay algo que ha generado todo tipo de reacciones, pero también deseo desde que saltó a la fama en el mundo del entretenimiento. Sus pezones. Así como lo lee, la actriz tiene una forma peculiar de marcar su estilo y es no usar brasier.
Tanto en sus personajes como en su vida real es normal verle los pezones. Desde su personaje en Friends, este se convirtió en su sello, mucho antes de que movimientos como Free the nipple aparecieran en la sociedad y tuvieran tanto impacto.
Por ejemplo, la actriz estuvo en la temporada de premios de 2020 y utilizó un vestido en la gala que dejaba al descubierto la ausencia de brasier y lucía sus “botones” con naturalidad. Algo que incrementa la sensualidad en la rubia, una que ha deleitado a millones por años.
De hecho, en una entrevista en Vogue en 2017 aseguró que “es una de esas cosas de las que se habla... Y no sé por qué se supone que debo avergonzarme de mis pezones, es simplemente la forma que tienen mis pechos”.
Una de sus últimas portadas fue la de despedida de la revista Allure, medio que dio por finalizada su versión impresa con Aniston en la portada. En esta, su escultural silueta se robó el show con un abdomen tonificado e, irónicamente, solo unos tapapezones en la parte superior. Junto a sus candentes fotos la actriz aseguró que “ya no tengo nada que esconder”.