“Siempre fue mi disfraz favorito, sigues siendo toda una dulzura”, le dicen por redes sociales a la cantante
El año pasado, la vida de la cantante más afamada de la cultura del pop tuvo un cambio radical. Dos periodistas importantes de la nación norteamericana se aliaron con Netflix para sacar un documental sobre su vida.
Al parecer, el papá de la artista se aprovechó de su talento para explotarla y sacar provecho millonario, lo otro es que nunca se llevaron muy bien y hasta le ayudó a quitarle la manutención de sus hijos. Una serie de acontecimientos se llevaron a cabo en contra de Britney sin que los demás supieran y, por eso, la cantante, según narran en el audiovisual, comenzó a enviar mensajes ocultos con su contenidos de Instagram.
Luego de que saliera el documental, la cantante volvió a ser tendencia y un juez de Estados Unidos finalmente le quitó la tutela que no estaba dejando a Britney ser libre, desde entonces, la princesa del pop se volvió a casa, recuperó la libertad de su dinero y pudo ver con más tranquilidad a sus hijos.
En Instagram tiene una comunidad de 41.6 millones de seguidores donde muestra sus outfits y baila de una forma característica —de aquella con la que despertaba todo tipo de suspiros en sus conciertos—.
En una de sus últimas publicaciones, se le vio vestida de colegiala, mostrando sus piernas, abdomen, con extensiones de cabello y la pestañina en los ojos que parece corrida aunque esté maquillada. La publicación cuenta con 86 mil ‘me gusta’.
Además de vestirse como colegiala, también se disfrazó de chica Coca Cola, de bailarina, se vistió de novia y así juega con su vestuario donde se le ve un afán por tener las curvas que tenía a sus 19 años. Lo otro es que en varias de sus imágenes se le ve sin ropa y con emoticones que le tapan sus partes íntimas. Britney ya no es la princesa del pop de hace muchos años.
La cantante usó la minifalda de colegiala que se volvió tendencia en 1998, cuando sacó su video Baby One More Time, el 28 de septiembre. En el clip que pasó a la historia se ve a la norteamericana en su faceta más sensual, luciendo muy inocente y como niña joven que canta y baila por los pasillos de una escuela secundaria y cantando frases sobre no estar sola y pidiendo señales de amor, luego de una ruptura amorosa.