La espectacular modelo libanesa tiene una hermanita que le sigue los pasos.
Mia Khalifa es una de las mujeres más sexys del mundo y no es para menos, tiene un par de cosas que la hacen toda una belleza. La libanesa se convirtió en celebridad por las películas xxx, sin embargo, hace tiempo dejó el negocio y se dedicó a crear contenido en OnlyFans.
Mia es famosa por su pasado y su presente en el entretenimiento para adultos y por lo activa que es en sus redes sociales. Lo que no se sabía era que Mia no era la única dueña de una belleza exótica en su familia. Resulta que tiene una hermana menor que también le sigue los pasos y que también tiene ese par de razones alucinantes en su delantera.
Su nombre es Mati Khalifa y tiene apenas 18 años de edad. Su historia es diferente a la de su hermana mayor y ella decidió poner manos a la obra e incursionar en este erótico mundo con su propio perfil en la página azul. Muchos dudaron de si era o no la hermana de Mia hasta que ella misma lo dio en su cuenta de Twitter “sí, soy la hermana de Mia Khalifa”.
Su contenido es completamente explicito y es de las que le encanta jugar con la censura de Instagram. En su cuenta de esta red social no teme en poner provocativas fotos que dicen mucho de lo que sus fanáticos pueden encontrar en su perfil de Only.
En 2014 la vida de Mia Khalifa cambió para siempre cuando se convirtió en actriz del cine para adultos. Su vida cambió cuando recibió una curiosa invitación de alguien cercano que la fue metiendo en este mundo sin que ella se imaginara lo que pasaría en el futuro.
Pero lo que parece un golpe de suerte para muchos, resultó ser una pesadilla para Khalifa. Por aquel entonces, esa persona la fue metiendo en este tipo de entretenimiento para ser una estrella porno, sin imaginarse que llegaría a ser una de las que mayor éxito ha tenido en la industria.
Hace poco, la libanesa decidió hablar un poco más de ese momento en que empezó a meterse en este negocio y al parecer esta no era la idea que tenía para su vida. Mía no la pasó tan bien como podría llegar a pensarse.
La modelo relató cómo una relación sentimental la terminó llevando por el camino del porno. Cuando era adolescente un romance con un militar se fue convirtiendo en una relación “tóxica”. Según ella, el hombre del que estaba enamorada la manipuló y la trató “como un juguete”.
“Era una relación en la que siento que muchas chicas entran cuando están en su adolescencia”, lamentó. Además, describió a esta persona como “extremadamente abusivo”. Cuando cumplió los 18 años se casó con este hombre y con 20 años de edad fue presionada para que se metiera por completo a hacer pornografía. “Puso todo ese mundo frente a mí y lo alentó. El consenso fue: ‘Deberías hacerlo, creo que sería genial’”.
La libanesa trabajó varios años en esta industria hasta que un polémico video la llevó a lo más alto, pero también la metió en problemas y la terminó sacando del mismo. En este, salía ella portando un hiyab islámico (el pañuelo usado por algunas mujeres musulmanas para cubrirse la cabeza). Tras usarlo, recibió amenazas por parte del Estado Islámico.
“Después de dejarlo, mi cuenta de Instagram fue hackeada por simpatizantes de EI, que publicaron propaganda por todas partes. Así que Instagram la eliminó y no me hice una cuenta nueva hasta un año después, cuando decidí aceptar mi destino como la infame exestrella porno e intentar cambiar la narrativa”, aseveró en entrevista con la BBC hace un tiempo.