Jhoanna es una joven de 29 años alérgica a toda clase de químicos, olores e incluso a los besos de su esposo Scott.
Johanna Watkins sufre de Síndrome de Activación Mastocitaria (MCAS) y a diferencia de lo que muchos de ustedes piensan no es una enfermedad rara, es tratable. El sistema inmunológico de Johanna resiste muy pocos medicamentos. Los que usaba antes ahora le producen inflamación y diversas reacciones. (La dura vida de la mujer que es alérgica al agua)
Su esposo Scott pasó más de un año remodelando la casa para que fuera un lugar más seguro y tranquilo para ella. Pero al entrar Johanna se desmayó y perdió el conocimiento por el olor que producía su nuevo hogar.
Tiempo después Wakins recuperó el conocimiento y fue bañada por sus dos hermanos, las únicas personas a las que no es alérgica. En cambio, el único contacto que han tenido Scott y Johana, luego de ser diagnosticada, es cuando van a una cita médica o a emergencias de resto hasta un beso podría matarla. (La rara enfermedad post orgásmica que solo afecta a los hombres)
Mientras ella vive encerrada en su cuarto, Scott le prepara las dos únicas comidas que puede consumir que son cordero con pepino y una carne especial con zanahorias. La comunicación de esta pareja es a través de Skype. Jamás duermen en la misma cama. sin embargo a través de las mismas citas virtuales se ponen de acuerdo para ver las mismas películas y programas de televisión, pero en diferente cuarto.
Scott no se dió por vencido y decidió pedir ayuda para seguir mejorando la calidad de vida de su esposa. Gracias a la página Gofundme logró recaudar 125,000 dólares (más de 360 millones de pesos) con lo que construyó un sistema de presión positiva para mantener fuera cualquier olor, compró muebles nuevos que se calientan para enmascarar los alérgenos y mantener la oscuridad de la casa porque Johanna también es alérgica a la luz del sol.
Aún así Johanna no se ha podido adaptar a los cambios. Su estado es tan débil que no logra estar de pie mucho tiempo, pero su esposo confía en que poco a poco se va a ir adaptando y podrá estar mejor en su propia casa. (¿Sabía que ser infiel lo puede enfermar?)