Tomar la decisión de hacer actividad física no debería ser un dolor de cabeza.
Muchos esperan el momento ideal para tomar la decisión de empezar a ir al gimnasio. Otras personas creen que ya es muy tarde y no podrán alcanzar los objetivos que quieren. Mientras que algunos encuentran muchas razones para evitar empezar a hacer actividad física.
Para muchas personas, ir al gimnasio o hacer una rutina de ejercicio no es una decisión fácil de tomar, pero la realidad es que mientras encontrar motivación puede ser un dolor de cabeza, con la decisión ya tomada existen varios trucos que les pueden ayudar a no decaer en el intento y continuar con la meta de mejorar su estilo de vida.
Si una persona ya tomó la decisión de empezar a ir a un gimnasio y aprender rutinas de ejercicio que le ayuden a perder grasa, tonificar, hacer crecer los músculos o tener un estilo de vida saludable, debe saber también que esto no tiene que ser un momento difícil del día, por el contrario, puede encontrar la manera de disfrutarlo.
De esta manera, la preparación para hacer ejercicio tiene un papel protagónico para que la motivación no se acabe en el camino y durante la rutina el cuerpo esté adaptado y dispuesto al esfuerzo que va a realizar.
Objetivos claros
Quemar grasa, bajar de peso, tonificar los músculos, mejorar la resistencia o prepararse para correr una maratón, sin importar cuál sea la meta, es importante tenerla clara para encontrar la rutina adecuada para conseguir ese objetivo. Un experto puede ser un gran aliado, por eso en Smart Fit siempre encontrarán un profesional para definir cómo llegar a las metas propuestas.
Organizar los ejercicios
Es importante realizar primero los ejercicios que involucran más de un músculo y dejar para después los movimientos analíticos o de aislado, en los que solo se trabajará un músculo por separado. De igual forma, es bueno intentar iniciar con pesos livianos e ir aumentando gradualmente para que los músculos se vayan acostumbrando a la intensidad de los ejercicios, según explica Smart Fit.
Siempre un buen calentamiento
Las primeras series del entrenamiento deben ser ligeras y cómodas para que los músculos y articulaciones se preparen, así como para que mentalmente cada persona se adapte al movimiento. Realizar un buen calentamiento es esencial para obtener los mejores resultados y evitar lesiones.
Descanso y estiramiento
Es importante encontrar el balance para que el músculo permanezca caliente durante el entrenamiento y que tenga, por lo tanto, la capacidad de seguir trabajando. Pero, por otra parte, no se puede olvidar que el músculo regenera sus fibras cuando está en reposo, por lo que también se debe respetar ese tiempo. El reposo recomendado entre las repeticiones de un determinado ejercicio es de 30 segundos a un minuto.
La rutina comienza en la cocina
Adoptar un plan alimenticio a la medida de los objetivos es ideal. Para este caso, es necesario consultar con un especialista para encontrar orientación sobre los alimentos, porciones y el consumo de algún suplemento nutritivo para los entrenamientos.
*En colaboración con Smart Fit