María Paulina Buendía le da unos consejos básicos para que usted no la vaya a embarrar cuando se va de conquista.
Digamos que usted y yo somos amigos. Muy amigos. Y digamos que usted, soltero desde hace rato, quiere que le presente a esa gran amiga mía que vio una vez y que siempre le ha parecido divina. Digamos que yo le digo que sí. Pero antes, por favor, tenga en cuenta lo que no debe hacer si no quiere quedar en evidencia tan rápido.
¿Usted no ha oído que el que muestra el hambre no come? ¡Pues aplíquelo! Está bien: sáquela a bailar. Pero no se pase con las vuelticas merengueras que la van a acabar mareando, ni trate de bajar la mano más de lo debido. Si le dice que se tiene que ir temprano porque al otro día va a clase, no le responda que usted la lleva y la espera en la entrada de la universidad. Bájele a la intensidad.
Lea también: Cosas que no debe hacer para no parecer un líchigo
Importante: no la meta a Facebook sin conocerla personalmente o luego de la primera salida, ni mucho menos se le ocurra escribirle un mensaje de WhatsApp cuando esté borracho. Y hágase un favor: no le dé por empezar a trotar en las mañanas solo para encontrársela en el parque. ¡No sea tan obvio!