Son muchos los que se quejan cuando sale un nuevo iPhone, asegurando que sus celulares ahora están más lentos y la pila le dura menos. SoHo le cuenta si eso realmente pasa y por qué.
El New York Times reveló que entre septiembre y comienzos de noviembre, las búsquedas en Google del término ‘iPhone lento’ se duplicaron. Fue precisamente en ese lapso cuando salieron a la venta las nuevas joyas de Apple: el iPhone 8 y el iPhone X. El hecho no es ninguna coincidencia ya que existe un mito —ha existido desde hace unos años ya— que asegura que cada vez que la marca de la manzana lanza un producto nuevo, los antiguos empiezan lentamente volverse obsoletos. Esto, deliberadamente lleva a que los usuarios se vean obligados a comprar lo nuevo y el círculo continúa con cada lanzamiento.
(Cómo hacer que la pila de su iPhone le dure más)
Pues bien, ese mito tiene cierto grado de realidad pero, contrario a lo que muchos piensan, no es algo que Apple o cualquier otra compañía de celulares, haga a propósito. Le explicamos: por lo general, cuando se anuncia un teléfono, también se lanza un software nuevo o una actualización del actual. Y ahí está la clave. Apple, por ejemplo, empieza a mejorar sus equipos y le notifica a los desarrolladores externos que mejoren sus aplicaciones, todo acorde con la nueva actualización. Así, los celulares se ven obligados a ser actualizados para que realmente funcionen bien. De lo contrario empezarán a volverse lentos, a perder pila más rápido e inclusive a apagarse por sí mismos.
Lo que sí es cierto es que esa actualización, por ejemplo, puede no estar disponible para todas las versiones de iPhone o puede no funcionar con versiones viejas así se hayan actualizado. ¿Por qué? Porque es clarísimo que ese software nuevo está pensado para trabajar de manera óptima en los equipos más nuevos y por eso usted empieza a pensar que su iPhone de dos años está viejísimo.
Entonces, ¿qué soluciones hay?
La más corta y directa: comprar el nuevo iPhone. Pero la gran mayoría no puede darse ese lujo. Afortunadamente hay varios pasos para controlar el tema y no verse afectado. En primer lugar, antes de actualizar su celular, asegúrese de borrar todo lo que ya no necesite —fotos viejas, aplicaciones que no usa…— y luego haga un back up de su información. Esto permitirá que el celular asegure que todo esté a salvo y limpiará el sistema. Así, la actualización será más eficiente y más rápida. También, es clave que haga un restablecimiento de los ajustes para seguir limpiando el celular. En este video le muestran cómo hacerlo.
Por último, asegúrese de liberar la mayor cantidad de espacio posible en el celular porque, por lo general, con cada instalación nueva de software, el equipo necesita un poco más de espacio. Hay programas como Dropbox o Google Photos en donde puede pasar fotos y videos y liberar espacio. Si hace estos trucos, su celular, pese a tener una nueva actualización, debe seguir funcionando bien. De lo contrario, quizás es hora de hacer el gastico y cambiarlo. (Consejos para tener más espacio en su celular)