Ídolo o villano, Diomedes Díaz marcó la historia musical reciente en Colombia, la suya la cuenta la exitosa productora Dynamo en un documental con imágenes inéditas. Algunos de los escándalos del vallenatero que se pasaron por alto, se los recordamos acá.
La vida de Diomedes Díaz, que estuvo rodeada de música, mujeres, hijos y drogas, volverá a la pantalla, pero ahora en un documental en Netflix. El ídolo vallenato es, sin ninguna discusión, uno de los artistas más grandes en su género y en el entorno musical del país, pero no se puede tapar el sol con un dedo frente a las diferentes controversias que tuvo durante su vida artística, episodios que son material de crónicas, entrevistas, reportajes y ahora una producción audiovisual de una hora y 40 minutos.
Desde el 30 de marzo llegó Diomedes: el ídolo, el misterio y la tragedia a la plataforma de video, una producción que relata la vida y carrera del llamado ‘Cacique de la Junta’, cuyo legado fue opacado sobre todo frente a las nuevas generaciones por la acusación de haber asesinado a Doris Adriana Niño, una de sus más fervientes fanáticas, en 1997.
En el documental se verán detalles sobre los logros musicales del artista, los problemas que tuvo con el consumo de drogas, la mafia en Colombia y hasta se cuentan los motivos de su fallecimiento.
Aunque la vida del intérprete de “Sin medir distancias” es conocida por muchos, en este proyecto veremos imágenes de archivo no conocidas, que acompañarán los testimonios de grandes autoridades en la industria musical y el folclor colombiano como: Jorge Barón, Iván Zuleta y Tito Castilla. Además, tendrá la participación de su hijo Rafael Santos y su viuda Luz Consuelo Martínez.
El documental del también llamado ‘Papá de los pollitos’, es el primero de Netflix producido para el mercado local. Sus directores, Jaime Barbosa y Jorge Durán, hablaron con SoHo.
“Lo nuevo dentro del documental son las imágenes de archivo que logramos. La recopilación fue un trabajo muy juicioso y es algo que muy poco se ha visto en Colombia en producciones audiovisuales”, contestó Barbosa. “El archivo es lo más atractivo de la investigación y del documental”.
Para nadie es un secreto el ídolo que fue el vallenatero, razones de sobra había para dedicarle un documental. “Los que hace Netflix se caracterizan por retratar muy bien a personajes épicos y Diomedes encaja dentro de esos criterios. Para nosotros él es un personaje excepcional, los picos y valles que tuvo en su vida fueron tan dramáticos que cuando se cuentan de forma coherente y responsable, se logra ver que termina reflejando a la sociedad que le tocó vivir”, apuntó Durán.
Ya que la pieza audiovisual se centra en lo acontecido en la vida de Diomedes, uno de los momentos más impactantes del proyecto será el relato sobre la extraña muerte de Doris Adriana, por la que el cantante fue condenado y pagó 36 meses de prisión, un hecho que le costó un rechazo evidente entre las mujeres.
Sobre el hecho, los directores dijeron que no habrá detalles nuevos. Su intención no es revivir el tortuoso proceso judicial. “Nosotros nos apegamos mucho al archivo judicial, a lo que dijeron las instituciones, los abogados, los testigos de primera mano, que fueron los escoltas, pero el documental no es de ‘chiva’; la idea no es destapar algo sensacional. Lo que lo hace novedoso es tratar de contar todo el cuento en un formato de hora y media, en un ángulo de documental con un objetivo de neutralidad”, reiteró Durán.
Uno de los momentos más impactantes del proyecto fue cuando el hermano de la fallecida participó dando su testimonio. Sobre su voz, Barbosa contó que Rodrigo Niño “fue muy relevante en la historia, y también una persona muy fuerte que siempre decidió darle justicia al nombre de su hermana. Toda la vida él se ha encargado de limpiar la imagen de ella”.
El proceso de investigación, grabación y edición del documental fue de tres años. “Ponle que la investigación duró 6 meses y siguió de largo mientras empezamos a producir. En esto, el proceso de posproducción fue el más largo y lo más difícil fue desde la conceptualización de la idea hasta el día del lanzamiento. Han pasado 3 años”, reveló Durán.
Si bien la vida del artista tuvo muchos altibajos en los que el éxito musical del artista se vio opacado por controversias que no fueron pocas, el largometraje no se centrará en ellas. No es el objetivo. “No queríamos polemizar por polemizar, además por el formato que tiene un limitante de tiempo. Hubo polémicas que las conocíamos y que no nos avanzaba en la narrativa, entonces decidimos no profundizar en ellas”, comentó Jorge Durán.
Por su parte, Jaime respondió que la idea fue contar “algo más profundo de él y entender por qué sigue siendo un ídolo a pesar de ser un personaje muy polémico”. El director que hace parte de Dynamo Producciones agregó que no se trataba de contar solo lo malo, “porque solo contar eso no lo explica y no es honesto con el personaje que queríamos abordar”.
Demandas por alimentos:
Uno de los temas de los que más se habló durante la vida del artista, pero que no se mencionó en el largometraje, fue la conocida vida amorosa del también llamado ‘Diomedes Dios’. Lo que para muchos era muestra de virilidad y para otros de irresponsabilidad, lo llevó a reconocer 21 hijos no sin antes pasar por varias demandas por alimentos.
Una de estas, de las más conocidas, fue la que interpuso su exesposa Patricia Acosta luego de cuatro años de divorciados, demanda en la que la mujer exigía el pago mensual de 10 millones de pesos para cubrir los gastos de sus hijos.
Mujeres, alcohol y drogas:
Al ser uno de los artistas con mayor reconocimiento de la última década del siglo XX, a Diomedes le llovieron mujeres que buscaban un beso o hasta una relación con el artista. Sin embargo, no fueron las mujeres su talón de Aquiles como sí sus excesos en el consumo de alcohol y sobre todo de drogas, una adicción con la que luchó hasta su muerte el 22 de diciembre de 2013.
“Yo siempre me he tomado mis tragos, hasta ahora y los que faltan. Dentro de esta vida artística no te puedo negar que las drogas son algo normal. Yo he probado de todo, he tenido fiestas que pa’ qué te cuento”, le confesó el artistas a José Gabriel Ortiz en una reveladora entrevista sobre su drogadicción. “Gracias a Dios no me quedé en eso. Siempre que uno se fume algo o consuma algo, habrá gente que armará un escándalo, pero eso es natural, eso lo hizo Dios, solo hay que saber sobrellevarlo”, contó con su característico histrionismo.
‘No vienes Díaz’:
Precisamente su problema de adicción al licor y las drogas le pasaron cuenta de cobro y lo dejaron literalmente tirado en el piso, sin poder asistir a eventos que tenía comprometidos: desde conciertos, festivales y hasta ruedas de prensa, por lo que en la industria del entretenimiento se ganó el apodo de “No vienes Díaz”. Sin embargo, según contaron sus representantes, a la hora de grabar un nuevo disco era el más puntual en el estudio, porque lo apasionaba cantar en el que consideraba un altar.