Abiertamente Kaká ha dicho que las creencias cristianas hacen parte de su cotidianidad, al punto de haber esperado para tener relaciones sexuales después de casarse. Hoy, retirado del fútbol, opina en SoHo sobre su viejo deseo de ser pastor de una iglesia.
Ricardo Kaká nunca ha ocultado su fe y no tiene problemas en hablar abiertamente de esta. Alguna vez hasta llegó a asegurar que, de no haber sido futbolista, ante la importancia que es la religión para él, pudo haber tomado un camino como pastor evangélico. Sin embargo, ¿qué piensa hoy en día de esta opción después de retirarse del fútbol.
Durante muchos años, tanto él como su exesposa Carolina Celico, de quien se separó en el 2015, hicieron parte de la iglesia brasileña Renacer de Cristo, pero en el 2010 anunció que abandonaba esa comunidad, para continuar en la búsqueda de Dios de una manera más independiente.
Aunque en aquel tiempo no hubo muchas explicaciones, al parecer habría tomado esta decisión por haber perdido la confianza en esta iglesia, luego de que sus fundadores fueran condenados en el 2009 a cuatro años de prisión por evasión de impuestos por la justicia de São Paulo.
No obstante, esto para nada le hizo perder la fe a Kaká, quien durante su etapa como futbolista, siempre aprovechó la oportunidad para celebrar sus goles con una camiseta que tenía la leyenda “pertenezco a Dios”, dejando de lado en todo momento la prohibición de la Fifa
Ahora que ya está retirado, Kaká reafirmó que su su fe es algo que está relacionado con todos los aspectos de su vida: “mi fe siempre ha sido una cosa que al principio quería desvincular un poco de mi vida profesional, para no mezclarlo mucho, pero al final es imposible porque es lo que yo era y lo que yo soy”, reafirma el jugador sobre sus creencias. “Entonces todas las veces que hablo de mí, tengo que decir lo que soy y la fe es parte de mi vida, entonces sigo igual. La fe en Jesús sigue igual”, expresó el exfutbolista para SoHo.
Y ante el camino que pudo haber tomado si no se hubiera dedicado a ser el volante fino que fue, el brasileño agregó: “no tengo esta idea ahora de ser pastor, pero un evangelista hace parte de mi vida y de mi personalidad”, enfatizó.
La idea de dirigir una iglesia cristiana en su país está descartada, pues también está enfocado en aprender más de fútbol, razón por la que empezó a hacer cursos de gestión financiera y de marketing, además de haber terminado el curso de entrenador. Las bendiciones de Kaká por ahora seguirán siendo únicamente sus jugadas que se convirtieron en un legado para el fútbol.