Messi es campeón, Argentina es campeona, la copa vuelve a Suramérica después de 20 años. En un partido inolvidable Argentina y Francia empataron 3-3, con un dramático empate en el tiempo extra, pero de nuevo el ‘Dibu’ Martínez haciendo lo mejor en penales.
No existe discusión: ha sido el mejor partido de la historia de la final de un mundial. Un drama impresionante, después de 75 minutos de cátedra de buen fútbol de Argentina impulsado por un partido extraordinario de Di María, el equipo de Francia con el arma infalible de Mbappé, empató el juego y puso el máximo nerviosismo en el equipo de Scaloni.
En el tiempo extra el 3-2 del gol que se encontró Messi volvía a ponerlos campeones, pero como todo en Latinoamérica es sufrido, llegó el empate con otro penal de Mbappé, lo que obligó la definición desde los 12 pasos.
Ahí, solo basta decir que en el arco argentino estaba el Dibu Martínez y el resto ya es historia, el arquero argentino volvió a mostrarse gigante, atajó dos y evitó el bicampeonato para Francia. Argentina es campeona, alcanza su tercera copa.