Las calles de la capital se inundaron con la felicidad de los hinchas argentinos.
Argentina escribió un nuevo capítulo en su historia en el fútbol internacional de la mano de Lionel Messi, al que llaman el mejor jugador del mundo e incluso, muchos afirman, que es el mejor de la historia del deporte más famoso de todos.
La albiceleste lo dejó todo en la cancha y venció a los campeones del mundo el pasado 18 de diciembre en Qatar. Una final que se definió desde el punto penal y que le dio la tercera copa de toda su historia al país, que desde que Maradona la levantó en 1986, nadie lo había vuelto a lograr.
La pasión de los argentinos por el deporte es famosa por como viven el fútbol. Pareciera que en sus venas corriera la pelota y celebran y sufren como si no hubiese nada más por lo que sentir. Por ello, este triunfo enloqueció a los argentinos y los tiene viviendo un sueño desde el domingo.
Las calles de todo el país vibran con el logro de la albiceleste, pues ver a Messi levantando el trofeo del mundo era algo que muchos pensaron que se quedaría en un sueño, pero ahora lo viven en la realidad. La selección llegó de Qatar durante la madrugada del martes 20 de diciembre y desde entonces la afición no los ha dejado solos.
Los jugadores trajeron la copa desde Qatar para su gente y esta los lleva esperando desde que se coronaron el pasado domingo. Las calles de Buenos Aires están inundadas de personas que no deja de cantar y celebrar su tercer Mundial y de agradecerle a Lionel por haber cumplido su promesa.
Al mediodía del martes 20 de noviembre la Selección salió del predio de la AFA hacia el obelisco, pero la multitud los acompañaban desde la entrada y por todo le camino y la euforia impidió que se lograra terminar el recorrido. Por seguridad, el bus que llevaba a la albiceleste se desvió y terminaron desde los aires.
De acuerdo con el presidente de la AFA, Chiqui Tapia: “no nos dejan llegar a saludar a toda la gente que estaba en el Obelisco, los mismos organismos de Seguridad que nos escoltaban, no nos permiten avanzar. Mil disculpas en nombre de todos los jugadores Campeones. Una pena”.
En las calles las personas celebran como nunca antes en la historia. Se dice que hay unas 5 millones de personas en la caravana que llena la ciudad con banderas, globos, cantos desde las avenidas, casas, carros, balcones, semáforos, postes y hasta desde la punta del obelisco de la capital.
Este será un día histórico para los argentinos, un día cívico en el que la Seleccion argentina trajo la copa del mundo nuevamente a su tierra de la mano de Lionel Messi, el chico de Rosario que dicen es el mejor de toda la historia del fútbol.