La selección Argentina eliminó a los croatas en semifinales.
El pasado 13 de diciembre se llevó a cabo la primera semifinal de la copa del mundo de Qatar 2022. El enfrentamiento fue entre Argentina y Croacia. Un encuentro que tiene un pasado reciente y que se definió como un ajuste de cuentas.
En Rusia 2018, Croacia fue subcampeón mundial cuando perdió 4-2 ante Francia. En su camino a este partido, se enfrentó a Argentina y le encajó 3 goles en fase de grupos. Ahora, en un partido tan decisivo como una semi, la albiceleste le devolvió el favor con la misma moneda, un 3-0.
Aunque los liderados por Messi marcaron dos goles para repetir una y otra vez, el que abrió el marcador fue uno desde le punto de penal que generó polémica, pues muchos aseveran que no lo era. Uno de los que habló al respecto fue el capitán croata, Luka Modrić.
“Estábamos bien, controlando el partido y este córner que no nos da el árbitro y el penalti, que para mi no era lo cambia todo. El argentino tira y choca contra nuestro portero, va a por él, no puedo creer que pitara ese penalti. Esto cambia un poco el partido. Pero no podemos cambiarlo, hay que recuperarse e intentar ganar el próximo partido”, indicó.
Ahora, los subcampeones disputaran el tercer puesto con el que pierda entre Francia y Marruecos, partido que se llevará a cabo este miércoles 14 de diciembre. Respecto a este partido, Luka dijo que: “hemos hecho un gran Mundial y ahora hay bronce en el juego y tenemos que prepararnos, porque si lo conseguimos también es un buen éxito”.
Adicionalmente, el futbolista no reparó en elogiar a Lionel Messi a quien se enfrentó pro muchos años en el famoso clásico Barcelona Vs. Real Madrid. “Ojalá Messi gane el Mundial, es el mejor de la historia”, aseguró.
En el fútbol siempre estarán dos caras: la del que gana y la del que pierde. Mientras unos celebran, los otros lloran. En este mundial, las lágrimas de los grandes del deporte han roto más de un corazón. Primero fueron las de Cristiano Ronaldo y ahora son las de Luka Modrić.
La estrella del Real Madrid jugó como nunca esta copa, pues a sus 37 años, fue la última oportunidad que tuvo para alzar la copa con su selección. Para el croata no hay más que elogios, pues su talento no tiene comparación.
Finalizando el partido frente a Argentina y con una Croacia derrotada, Modrić fue sacado de la cancha y recibió una monumental ovación del público, una que mereció por completo el 10 de su selección.