Clima extremo, restricciones por la religión y corrupción. El Mundial de Qatar sigue siendo cuestionado, ahora por el mismo expresidente de la FIFA que lo adjudicó y que reaparece para acusar a los franceses de estar metidos en el ‘Qatargate’.
La controversia por la realización del Mundial en Qatar no cesa ni siquiera a menos de dos semanas de su inauguración. Los abusos laborales, la violación de derechos humanos, su legislación apegada a la religión musulmana y hasta el intenso clima, son razones de peso para pensar que no era una buena idea hacer este primer mundial en Medio Oriente.
Uno de los responsables de que el Mundial se hiciera con todas esas condiciones adversas es el suizo Joseph Blatter, presidente de la FIFA entre los años 1998 y 2015, quien le terminó adjudicando la realización a Qatar en 2010 en medio de una impresionante acusación de corrupción, particularmente de sobornos para que el país árabe le ganara la postulación a Estados Unidos.
Sin embargo, el máximo exdirigente del fútbol ha reaparecido ahora en una entrevista para el medio de su país Tager-Anzeiger, en el que ha hablado de la Copa del Mundo que está por realizarse. “La elección de Qatar fue un error y asumo mi responsabilidad porque yo era el presidente de la FIFA en aquel momento”, aseguró, no sin antes responsabilizar directamente al expresidente de la Uefa, Michel Platini. “Gracias a los cuatro votos de Platini y su equipo, la Copa del Mundo fue a Qatar en vez de a Estados Unidos”, agregó en esa conversación.
La entrevista de Blatter confirma la existencia del llamado Qatargate, en el que participó el entonces presidente de Francia, Nicolas Sarkozy, quien les prometió a los qataríes los votos europeos para llevarse el Mundial de 2022 a cambio de que ellos compraran el París Saint-German (equipo del que el presidente era hincha y que estaba en crisis) pero también como parte de una transacción mayor.
“Seis meses más tarde, Qatar compró aviones de combate a Francia por valor de 14,6 millones de dólares, era por supuesto un asunto de dinero”, agregó Blatter, quien confirma así las denuncias hechas recientemente por medios públicos franceses sobre esa otra parte del trato corrupto.
El expresidente de FIFA, que salió en medio del mayor escándalo de corrupción desatado además en Estados Unidos (¿como una retaliación?) también afirmó que los mundiales deben realizarse en países grandes y no en los pequeños como Qatar, que es el país de menor tamaño que realizará una Copa del Mundo. “El consenso era que Rusia obtuviera la primera de esas Copas del Mundo (como así fue) y la segunda los Estados Unidos.”