No crea que solo los perros u otros animales se quedan pegados.
Aunque muchos piensen que todo se trata de un mito, si es posible quedarse pegado mientras se mantienen relaciones sexuales.
Son cientos de personas las que han tenido que pasar la vergüenza de llamar a un docto o de terminar en emergencias del hospital.
“Una noche nos pasó a mí y a mi difunto esposo. Literalmente no podía retirarse, se quedó ‘atascado’. Lo atribuí a la intensidad de la respuesta del músculo vaginal durante el orgasmo”, expresó Margarita Díaz en diálogo con BBC.
El Penis Captivus o síndrome del pene atrapado en la vagina fue concepto que apareció hace más de 100 años. En ese entonces la oración y mucha agua bendita era el “antídoto” perfecto.
De acuerdo con el doctor especialista John Dean: “Lo que puede pasar, teóricamente, es que mientras él está en la vagina, se va llenando de sangre. Al mismo tiempo, los músculos del piso pélvico femenino se contraen rítmicamente durante el orgasmo, no al nivel de un espasmo, pero sí una serie de contracciones que duran varios segundos”.
Además, agregó que durante esas contracciones el pene puede quedar atorado por varios segundos o minutos. El escroto se puede hinchar hasta que los músculos se relajan, la sangre vuelve a fluir, se pierde la erección y es allí donde el hombre se puede retirar.
Sin embargo, la sexóloga brasilera, Flavia Dos Santos, ha explicado que: “este fenómeno se presenta durante solo unos segundos cuando los músculos del piso pélvico de la vagina se contraen durante el orgasmo, ocasionando que el pene se inflame siendo imposible para el hombre retirarlo mientras se mantenga la erección”.
Hasta el momento no se sabe exactamente cuáles serían las causas de este fenómeno, aunque en los años 30 decían que eso únicamente le sucedía a las personas que tenían sexo ilícito, es decir, tener relaciones con personas extraoficiales o a escondidas.
Así también es importante diferenciar entre “Penis captivus”, que no es un problema grave de salud, y el ‘vaginismo’. Este último es una condición que si es más común y grave por la que se producen contracciones involuntarias, lo que a las féminas que lo padecen les impide sentir placer durante las relaciones, les es casi imposible.