La depilación masculina se ha vuelto cada vez más habitual. Ya sea por gusto, necesidad o por seguir los estándares de belleza, el género masculino ha ido cogiendo cancha para quitarse el vello de su cuerpo.
La prevención que había antes se ha ido derrumbando, según lo que cuenta la cirujana estética, Elvia Santos: “antes existía miedo o vergüenza, se pensaba que el hombre depilado perdía parte de su virilidad. Ahora desean uniformidad y una mejor apariencia a nivel estético”.
Desde hace algunos años los hábitos en depilación masculina están cambiando. Esta evolución se debe en parte a las nuevas tecnologías que han creado una gran variedad de métodos de depilación para cada tipo de hombre.
Muchos han dejado a un lado las máquinas eléctricas o cuchillas para adaptarse a lo que ofrece el mercado. Ellos también quieren estar bien presentados, quieren sentirse bien y mejorar el aspecto de su piel.
A medida que ha pasado el tiempo, los centros estéticos de depilación han notado un incremento en el número de individuos que están interesados en sus servicios.
Según un estudio hecho por la marca Philips, el 53 % de los hombres y el 69 % de las mujeres creen que cualquier tipo de pelo corporal que no sea en la cabeza, es muy desagradable.
Y es que es chistoso porque mientras que para algunos es vital tener una barba, para otros es necesario estar totalmente “limpios”, sobre todo cuando llegan las vacaciones.
Otra una encuesta realizada por el Journal of Sexual Medicine destaca que el 40 % de los hombres se rasuran por comodidad, el 20 % lo hace para sorprender a su pareja y el otro 20 % lo hacen exclusivamente para tener relaciones sexuales. Deportistas, ingenieros, profesores, modelos, heterosexuales, bisexuales, metrosexuales, todos se han ido dando cuenta de que la depilación no es solo para mujeres.
Según los deportólogos, para quienes están en competencia es casi obligatorio, porque facilita los masajes que se hacen en fisioterapia, también como medida de higiene o en el caso de los nadadores, mejoran sus resultados en las competencias.
En medio de este cambio cultural también se han evidenciado otras preferencias por quitarse los pelos de algunas zonas corporales. De acuerdo con varios centros estéticos como Depilarte, Laser Country, Green Gel y Wairua, antes era usual que pidieran depilación en pecho, axilas o espalda, pero se le ha sumado depilación en piernas, barba y en sus zonas íntimas, sobre todo de sus glúteos.
“A lo largo del tiempo hemos tenido un aumento sustancial de depilaciones en los hombres. En la actualidad manejamos entre un 45 % o 50 % que son clientes masculinos. Ellos se están sintiendo más cómodos para venir a los centros estéticos y lo más interesante es que lo que más se depilan es el área genital, perfilamiento de la barba y las axilas”, explicó la dermatóloga Ángela Pedraza.
Un dato curioso que revelaron estas organizaciones es que pese a que se podría pensar que los hombres son más quisquillosos a la hora de someterse a estos procesos, todo depende del método que se utilice. Por ejemplo, en el caso de la cera, tienden a sentir más dolor por los halones, en la zona del rostro cuando se usa el método del hilo igual; pero por medio de la depilación láser es un poco menos dolorosa para ellos porque al tener un tipo de piel más gruesa, lo resisten.
Para quienes quieran liberarse por un largo tiempo o de manera definitiva del vello que no está de moda -quizá después lo esté- la depilación láser es uno de los métodos más buscados, ya que es indolora; además de ser más eficaz porque eliminarlo desde la raíz en unas cuantas sesiones.