La historia ocurrió hace un par de años, sin embargo se volvió a viralizar en redes sociales.
En el 2019 un joven conmovió a sus compañeros de grado y a los asistentes, pues a pesar de que este podría llegar a ser el mejor día de su vida, al parecer fue el más triste. La razón fue que sus padres no asistieron a la ceremonia de graduación pese a que este recibió honores por su desempeño.
Jeric Rivas, un joven filipino, es el protagonista de esta conmovedora historia que le dio la vuelta al mundo hace un par de años y que nuevamente se volvió a viralizar. Una foto del joven llorando y cabizbajo, al ver que su familia no lo acompañó en uno de los días más importantes de su vida, conmovió a todos los usuarios en las redes sociales.
Ese día Rivas recibió su titulo en criminología y reportes de la prensa de ese país recalcaron que además fue merecedor de una mención por su destacado desempeño.
El joven decidió publicar aquellas tristes fotos, en redes sociales, acompañadas de un texto que decía “sentí una mezcla de felicidad y tristeza nuevamente. Miré a la derecha, miré a la izquierda, y en la parte de atrás y en el frente, todo lo que vi fueron caras felices que sonríen. Sentí mis lágrimas caer, me senté al lado. Sentí envidia”.
Al ver que el joven estaba derrumbado en plena ceremonia de graduación, sus profesores decidieron alentarlo y acompañarlo en aquel precioso momento.
Según la publicación que hizo el joven, sus padres no asistieron a su grado debido a que no lo aceptan en su vida. “Si están leyendo esto, este soy yo ahora y espero haberlos enorgullecido”.