Quiso dejar boquiabiertos a sus seguidores con sus sensualidad y terminó ganándose fuertes críticas
Por tomarse una foto sin ropa en un árbol que tiene más de 700 años de antigüedad, esta joven terminó haciéndose viral en redes sociales, pero ganándose fuertes comentarios e insultos de los internautas.
Son muchas las noticias que se hacen virales en Internet, unas que generan risa, otras malestares y también estás las que generan indignación y provocan grandes críticas.
Recientemente, se dio a conocer el caso de una influencer, que fue expulsada, junto a su esposo, de un país, por tomarse una foto desnuda en un lugar sagrado.
Se trata de Alina Fazleeva, una influencer rusa que se encontraba de vacaciones por Bali, sin imaginarse que terminaría siendo expulsada de Indonesia, todo por una foto.
La joven decidió tomarse una fotografía totalmente desnuda, en un árbol sagrado, que según reportes tiene más de 700 años de antigüedad, ubicado en un templo del distrito de Tabanan, provocando la indignación de las autoridades y de los regionales de Bali.
La imagen fue tomada por la pareja de Alina, Andréi Fazleev, y tras hacerse viral, fue que llegó a manos de las autoridades, quienes no dudaron en tomar represalias.
“Se ha comprobado que ambos realizaron actividades que ponen en peligro el orden público y no respetan las normas locales”, manifestó a la prensa local, Jamaruli Manihuruk, jefe de los servicios de inmigración en Bali.
Según también comentó Manihuruk, a la pareja se le castigará “con la expulsión”, por el acto que realizaron.
Detallan que a la pareja castigada no se le permitirá el ingreso a Indonesia en por lo menos seis meses. Además, deberán participar de una ceremonia de purificación de este lugar.
Ante la polémica generada, Alina Fazleeva aprovechó sus redes sociales para pedir disculpa de lo sucedido, y argumentar que fue un grave error, pero comentó que en Bali “hay muchos lugares sagrados en Bali y no todos están señalados”.
“Pido disculpas a todos los balineses e indonesios, lamento mis acciones. Estoy tan avergonzada, no quise ofender de ninguna manera, no tenía absolutamente ningún conocimiento de este lugar. Recé debajo de un árbol y fui directamente a la estación de policía para explicar este incidente y disculparme”, expresó la joven.
Por su parte, el gobernador de Bali, Wayan Koster, manifestó que no se permitirán este tipo de actos impuros en lugares sagrados y no se tolerarán a los turistas que no respeten la cultura local.