¡Insólito! Por más de dos décadas vivió engañado creyendo que había procreado, pero la verdad fue aún más dolorosa.
Luego de haber sostenido un matrimonio de 25 años y de haber criado a 4 hijos que siempre creyó suyos, se enteró de la manera más triste de una dura realidad. Esa es la historia de un hombre oriundo de Cali que con 51 años descubrió el engaño del que fue víctima por varias décadas.
Todo empezó un día en el que con normalidad fue al baño para miccionar y de repente empezó a sentir un fuerte dolor para orinar, pero teniendo en cuenta su edad pensó que era la próstata por lo que intentó dejarlo pasar. Sin embargo, luego de varios días con la molestia decidió ir al médico.
Considerando los síntomas que tenía el hombre, los especialistas le hicieron una serie de exámenes para descubrir que tenía y efectivamente sus síntomas estaban relacionados con la próstata pero también con un detalle que nunca se imaginó. Tal como le dijo el médico, él es estéril.
Aunque la noticia fue confusa, ese último dato cayó como un balde de agua helada pues según él y según su esposa, ambos habían tenido 4 hijos a lo largo de su relación.
“Llevamos 25 años de casados, tuvimos 4 hijos, ellos ya son adultos todos, (pero) hace unos meses me empezó un fuerte dolor al orinar, como lo más probable es que fuera la próstata que hasta ese entonces había funcionado bien, me hicieron exámenes de rutina y me dice el doctor que si es la próstata pero que yo soy estéril”, expresó el hombre.
Pese a las dudas que le generaba todo eso, antes de confrontar a su esposa tomó decisiones más inteligentes y se hizo unas pruebas de paternidad con sus hijos. “Con la duda acosándome la cabeza tomé algunas muestras de mis hijos y decido hacerme unas pruebas de ADN y resulta que no son hijos míos”, declaró el hombre engañado.
Hasta ahí todo era ya bastante dramático, puesto que su esposa le ocultó durante muchos años una verdad que debía ser conocida. Cuando él obtuvo los resultados y ya no había manera de que su pareja le negara nada, cuenta que llegó al lugar donde vivían y enfrentó a la mujer que le mintió.
En medio de la discusión, la esposa lo admitió todo y además le reveló el dato más dramático, pues resulta que el verdadero padre de sus hijos siempre estuvo a escasos metros de distancia.
“Llego a la casa, confronto a mi mujer, si es que le puedo llamar así y me admite que son hijos del vigilante que lleva prácticamente toda su vida trabajando en el conjunto, tras de todo me dice que lo hizo por amor a mí que porque yo siempre quise hijos y ella no quedaba embarazada”, relató el hombre indignado que luego de eso solicitó separarse de esa mujer y además como indemnización le pidió el 80% de todo lo que tenían.