Este reprochable hecho no solo tiene indignados a los paraguayos, sino también a los colombianos.
Un crudo evento sucedió el pasado martes 10 de mayo cuando dos hombres, como si fuera de película, llegaron en una moto acuática y uno de ellos disparó 3 veces contra la humanidad del fiscal paraguayo, Marcelo Pecci, en un hotel exclusivo de Barú, en Cartagena.
El hombre se encontraba en ese lugar en compañía de su esposa y habían escogido a Colombia como su lugar para pasar juntos su luna de miel. Los días de esta pareja habían transcurrido como los de cualquier recién casado, estaban felices y, además, el fiscal había recibido pocas horas antes de la tragedia, la noticia de que sería papá.
Todo era felicidad y tranquilidad hasta que dos sicarios llegaron al exclusivo sector y con tres tiros terminaron con la vida del funcionario público. Desde ese terrible momento, autoridades colombianas y paraguayas comenzaron a trabajar para determinar la identidad de los dos sicarios.
En la tarde de este martes, la Fiscalía General de la Nación en conjunto con la Policía reveló la foto de un posible sospechoso que fue señalado de ser uno de los hombres que llegó en la moto acuática al lugar y asesinó a Marcelo Pecci.
Autoridades revelaron que los sicarios habrían dado con el paradero del fiscal y su esposa gracias a las publicaciones que de manera inocente hizo la mujer, Claudia Aguilera, en sus redes sociales, donde señalaban en qué lugar se encontraban disfrutando de su luna de miel.
En diálogo con la Revista Semana, Claudia Aguilera contó cómo fueron esos segundos que sin lugar a dudas arruinaron para siempre su vida y la de su futuro bebé.
“Llegaron a la playa privada del hotel… no se pudo hacer nada, llegaron y de forma inmediata dispararon, mientras estábamos en la playa. El personal de seguridad no pudo reaccionar”, dijo Claudia.
Por el momento, la mujer ha recibido protección de las autoridades colombianas. Sin duda alguna esto que está viviendo es una completa pesadilla y pasará mucho tiempo para que logre curar estas heridas que le causaron con el asesinato de su esposo.
La pareja se había casado hace 5 días y decidieron que Cartagena sería el lugar ideal para pasar su luna de miel, lejos de imaginar que un grupo de malechores les estaban siguiendo los pasos para arruinar su vida.