Si a usted le dan muchos atracones, tome nota para que sepa controlar esa ansiedad por ingerir cosas que tal vez no son las más saludables para nuestro organismo.
Es normal que la mayoría de personas tengan desórdenes alimenticios, es decir, que coman a deshoras, que no coman, que coman en horas diferentes, que no se ingiera la cantidad de alimentos que se debería diariamente, lo que puede tener como consecuencia problemas gástricos y psicológicos al producir ansiedad.
La ansiedad se empieza a ver reflejada al comenzar a comer mucho, comer mal, consumir muchos dulces, mucho pan o algún antojito que tengamos, por lo anterior es necesario asumir que las consecuencias negativas a mediano y largo plazo pueden ser bastante negativas.
Es vital que comience a ingerir alimentos ricos en magnesio y vitaminas del complejo b como por ejemplo: pescado, gelatina sin azúcar, frutos secos, caldos o sopas de verduras, pepinillos, frutas deshidratadas, yogur descremado, cereales integrales, frutas, vegetales y huevos.
Cabe mencionar que uno de los factores claves a la hora de saber cómo controlar esa ansiedad es diferenciando si el hambre que se siente es real o más bien es algo emocional.
Por ejemplo, en el caso del hambre emocional, esta aparece de golpe, empieza a sentirla cuando sucede algo, le apetece algo en concreto, sigue comiendo así ya esté lleno y finalmente hay culpabilidad, mientras que en el hambre real aparece gradualmente, no hay una fascinación por un alimento en concreto, cuando se está satisfecho se deja de comer y no aparece sensación de culpa.
1. Tenga de 4 a 5 comidas diarias balanceadas, si es necesario, asesórese de un nutricionista.
2. Reduzca la cantidad de azúcar que consume a diario.
3. Duerma lo necesario para que no haya un desequilibrio hormonal.
4. Haga bastante actividad física.
5. Evite la cafeína.
6. Manténgase hidratado y tome mucha agua.
7. Planifique un menú semanal para que todo lleve un orden.
8. No se exceda al comer en la noche, consuma siempre algo ligero.
9. Incorpore frutas y vegetales en todas sus comidas.
Es importante resaltar que en caso tal de que sienta que su ansiedad ya es excesiva, busque ayuda de profesionales ya sea un psicólogo o un nutricionista, para que así también tenga la certeza de que la forma en la que está organizando sus comidas y alimentándose son las mejores, ya que no todos quemamos las mismas calorías ni nuestro cuerpo necesita la misma cantidad para consumir.