Un estudio realizado en Reino Unido asegura que la frecuencia de los encuentros sexuales de las parejas viene en picada
Esto era lo que faltaba. Ahora resulta que una de las actividades más placenteras de la humanidad tiene fecha de caducidad. La verdad es poco creíble. Sin embargo, un estudio ha revelado que las relaciones sexuales podrían llegar a su fin dentro de algunos años, ante la falta de deseo por parte de las parejas.
¿En realidad puede haber algo más interesante que revolcarse en la cama con esa persona que tanto deseo le genera? Pues al parecer, hoy en día, hay otras actividades que han desplazado el sexo de la cabeza de la personas y el interés por echarse uno que otro polvo viene disminuyendo de una manera estrepitosa que, para el 2030, podría tratarse de algo que a duras penas genere interés.
Ahora bien, ¿qué es eso a lo que tanta importancia se le está dando y por lo que el sexo dejará de ser relevante en las parejas? Pues nada más y nada menos que algo con lo que convivimos día a día, y que al parecer está copando todo nuestro tiempo sin pensar en la consecuencias, la tecnología.
Así lo ha dejado saber un estudio de Reino Unido, el cual llegó a esta conclusión luego de analizar el comportamiento y las costumbres sexuales de distintas parejas entre los 16 y los 44 años, de las cuales un 40 por ciento aseguró haber tenido una reducción en la frecuencia de su actividad sexual.
Y es que de acuerdo a las estadísticas, si bien las parejas de la década de los 90 tenían un promedio de cinco ‘polvitos’ al mes, las actuales redujeron en tres este promedio, un dato que preocupa David Spiegelhalter, estadístico británico y profesor de la Universidad de Cambridge, quien proyecto que, de seguir por este camino, la cama solo será un lugar para darse un beso de buenas noches y seguir de largo hasta el día siguiente sin que haya acción.
Al parecer el problema recae en que, ya sea una o ambas personas, estarían prestándole más atención a su vida en redes sociales, o a su afición por ver series en televisión o a través de las diferentes plataformas que existen, que la llama de la excitación y el placer sea más y más opaca a medida que pasan los días.
Habrá que esperar hasta el 2030 para comprobar esto. Sin embargo, no puede ser que la sociedad esté tan metida entre la tecnología que las relaciones sexuales estén pasando a un segundo o hasta tercer y cuarto plano, porque si es así, no queda otra que empezar a concientizar a las nuevas generaciones que no hay nada mejor que cuando dos cuerpos desnudos se encuentran y la calentura hace lo suyo. ¡Abajo la tecnología y que viva el sexo!