Revelan el oscuro pasado de una de las víctimas encontradas en una camioneta en Bogotá

A medida que van pasando los días, se van esclareciendo varias pistas y detalles del escabroso crimen ocurrido el pasado 18 de agosto en el que uniformados de la Policía de la capital del país encontraron cuatro cuerpos sin vida y con signos de violencia en una camioneta de gama alta en la Autopista Norte.

Uno de los cuerpos de los hombres presentó una herida en la región retroauricular derecha y una herida en la región temporal izquierda, otro tuvo señales de violencia en general, la mujer fue impactada con una bala en la cabeza en la región frontal izquierda y la última víctima presentó un orificio en su nariz y en la región occipital derecha.

De acuerdo con el secretario de Seguridad, Aníbal Fernández de Soto, se están ofreciendo una recompensa de hasta 20 millones de pesos para dar con el paradero de los responsables, aunque hasta el momento no se ha podido recoger mucha información al respecto.

Aunque en Blu Radio habían afirmado que los criminales que asesinaron a sangre fría a estos jóvenes, harían parte de una organización criminal denominada como Tren de Aragua, la alcaldesa de Bogotá se encargó de desmentir esta primera hipótesis, asegurando que esta banda delincuencial no está detrás de estos homicidios.

El oscuro pasado de las víctimas del sicariato en Bogotá

Las víctimas del sicariato fueron identificadas como: Juan Carlos Useche un ex policía de Cali, Leidy Alejandra Betancur pareja de Useche, Leonardo Sanabria, quien presuntamente era escolta de Useche y José Perosso Zabala.

Por un lado, Perozo, un individuo de origen venezolano, había sido capturado hace algún tiempo por la Policía Metropolitana de Bogotá y judicializado por la Fiscalía, por porte ilegal de armas. Pese a que tenía medida de aseguramiento preventiva carcelaria, no se entiende por qué estaba libre en el momento de los hechos.

Según la alcaldesa de Bogotá, sería una falla del Inpec. Lo más preocupante es que en la actualidad hay varios delincuentes cometiendo delitos en las calles en vez de estar pagando su pena o condena.

Por otra parte, Useche, la víctima principal, es decir, el objetivo número uno de los sicarios, tiene un pasado judicial bastante llamativo por el que muchas personas afirman que no estaba en los mejores negocios y que por ello lo mataron.

Useche hizo parte de la Policía Metropolitana de Cali, además estuvo en la cárcel por concierto para delinquir y fungía como prestamista de San Andresito. “Tendría una vida en el crimen desde hace varios años”, aseguró López.