Las polémicas declaraciones del exsacerdote Linero sobre impuestos para iglesia

El debate sobre la reforma tributaria ya está empezando a darse, pues el gobierno busca recaudar en su primer año una millonaria suma para poder realizar todos los proyectos que tiene en su plan de Gobierno

Desde la época de campaña los cercanos a Gustavo Petro dijeron que consideraban la opción de poner a tributar a las iglesias, una idea que no es del todo descabellada pero que sí ha generado todo tipo de críticas, pues muchos aseguran que no sería justo ya que varias no tienen los ingresos millonarios que se cree.

Ante ese debate de sí se deben o no imponer impuestos a las iglesias, el exsacerdote Alberto Linero, quien abandonó hace un tiempo sus hábitos, se pronunció y contó a detalle la realidad de las iglesias que él pudo conocer, pero también dio su opinión sobre el tema.

A través de una columna de opinión publicada en BluRadio, el famoso personaje declaró que a pesar de que nunca fue párroco que es el cargo que tienen los que administran los recursos de las parroquias, sabe cómo se manejan los dineros que entran a la iglesia y de cuánto se trata.

Según él, para hablar de los impuestos a las iglesias es necesario conocer todo el contexto. “Viví experiencias pastorales en Santa Lucía en el Atlántico; y en Docordó, en el sur del Chocó, donde pude ver las dificultades que económicamente se tienen para ejercer allí el ministerio”, contó Linero agregando que el dinero que entra a las iglesias no siempre es mucho ni siquiera suficiente para mantenerse, pues la única fuente de ingreso es la limosna y los eventos religiosos.

“Las limosnas de las celebraciones no dan para sostener el culto y los gastos de la casa cural, siendo este su sentido esencial. Recuerdo experiencias de celebraciones diarias en las que no se recogían más de 50.000 pesos en la limosna y en los domingos no alcanzaba a los 100 mil”, expresó el expadre.

Frente a eso comentó que “a veces no tenemos la visión completa de lo que significa la vida de algunos párrocos en los lugares más apartados de nuestro territorio, en los que acompañan a la comunidad y le sirven de manera desinteresada”.

“Sin embargo, tengo también la certeza de que el sentido de los discípulos de Jesús, es ser una comunidad contraste, mostrar cómo deben ser las relaciones y los valores con los que se debe vivir la cotidianidad”, agrega.

Por lo anterior, dice que aunque pueda ser un tema complicado el de los impuestos y hasta difícil de sostener “creo que tenemos que dar ejemplo de todos los deberes de ciudadanos, así como reclamar con firmeza y en paz nuestros derechos”, concluye.